ALICANTE. La crisis del coronavirus golpeó con tanta dureza la provincia de Alicante en el segundo trimestre del año, cuando se desató la pandemia y el Gobierno confinó a la población durante dos meses y medio, que su alcance supera el peor año de la crisis financiera desatada en 2008. Es la principal, y preocupante, conclusión del informe de coyuntura presentado este martes por el Instituto de Estudios Económicos de Alicante (Ineca).
El vicepresidente de Ineca, Antonio Fernández, ha presentado este martes el estudio, que estrena un nuevo formato (y a Caja Rural Central como patrocinador), acompañado del director de Estudios del instituto, Francisco Llopis, en una conferencia telemática. Fernández ha admitido que "los datos no son buenos, aunque la buena noticia es que van a ser los peores del año y que en el tercer trimestre mejorarán", mientras que Llopis ha advertido de que el retroceso para la economía provincial motivado por el confinamiento es de cinco años: "Hemos vuelto a valores de 2015, cuando empezábamos a recuperarnos de la anterior crisis, estamos otra vez en la casilla de salida".
En este sentido, el indicador Ineca, que resume la situación socioeconómica de la provincia para cada trimestre, ofrece el peor dato de la serie iniciada, precisamente, en 2008. "La recuperación en V no se va a materializar en la mayoría de variables", ha explicado Llopis, aunque en algunos sectores, como creación o disolución de empresas y compraventas de vivienda, el tercer trimestre compensará los datos del segundo, ya que "muchas operaciones simplemente se quedaron aplazadas por el confinamiento".
En la provincia el paro ha aumentado en 40.000 personas "pese a los ERTE", que han usado más las empresas de servicios (turismo y hostelería sobre todo) que las industriales, y el calzado ha sido el sector más afectado por la caída de las exportaciones, frente al agroalimentario que "ha salido beneficiado, pero no llega a compensar la caída del calzado". En el sector turístico, el que mejor ha capeado la crisis ha sido el rural, por delante del hotelero y de apartamentos, "por el cambio de hábitos y la búsqueda de destinos poco masificados".
El vicepresidente de Ineca ha resumido las conclusiones en tres grandes peticiones: en primer lugar, "todo el apoyo de la Administración al turismo, que es nuestro principal sector"; en segundo lugar, "una flexibilización de la fiscalidad"; y por último, "que los Presupuestos del Estado y de la Generalitat traten a la provincia como se merece".
Por otra parte, Antonio Fernández ha considerado que la victoria de Joe Biden en las elecciones de Estados Unidos es una buena noticia para la provincia de Alicante, ya que "históricamente los demócratas suelen ser menos proteccionistas que los republicanos", por lo que espera que la nueva Administración rebaje los aranceles impuestos por Trump y de esta forma la Costa Blanca pueda ver incrementadas sus exportaciones al otro lado del Atlántico.