Nos ha alegrado leer en ALICANTE PLAZA, los nuevos ánimos que embargan a la sociedad xabienca y a su Consistorio en pro de su anhelado Auditorio.
En mayo de 2018, redactábamos sobre lo que estimamos en la fase anterior, el acecho de la figura del “enriquecimiento injusto”, tan antigua como certera, pues procede del Derecho Romano y posteriormente incorporada a Las Partidas de Alfonso X El Sabio.
Afortunadamente para el Consistorio supo reaccionar a tiempo en este “affaire” y salir adelante, por ahora, solamente con “rasguños”.
En esta nueva licitación que va a acometerse, debe el Poder Adjudicador, convertir lo negativo en positivo de lo mucho anteriormente acontecido y obtener consecuencias concluyentes.
Los Pliegos de Condiciones, ya se sabe, son Ley para las Partes y tanto el Departamento de Contratación y los Servicios Técnicos, no nos cabe duda, habrán puesto su mejor cuidado en la redacción de los mismos.
Es muy frecuente, desconocidos a priori los entresijos de un Contrato, para preverlo todo, pero las herramientas que la Administración Pública, pone a disposición con sus Sentencias, Dictámenes, etc. permiten augurar un posicionamiento idóneo.
Suponemos que las “bajas temerarias”, habrán sido perfectamente descritas, al igual que gozar de un proyecto constructivo altamente fiable que permita un desarrollo de las obras sin sobresaltos, ya que lamentablemente, las deficiencias reflejadas en los mismos, son frecuentes.
Discúlpenme a quién corresponda, las licencias adoptadas, pero como experto en obras públicas y medioambientales, he visto demasiadas cosas, que no he deseado nunca que ocurrieran, durante lustros...