La IA, su potencial para aumentar ventas y los retos que encaran las pymes de la provincia de Alicante

ELCHE. "Es un honor para mí daros la bienvenida a este evento. Hoy seréis testigos de un encuentro sin precedentes: la revolución de la inteligencia artificial (IA) en las ventas. Este encuentro es una oportunidad para sumergirse en el mundo de la IA y descubrir cómo esta tecnología está transformando radicalmente la forma en la que las empresas operan". Este discurso de presentación del Encuentro Empresarial Jovempa: La Revolución de la Inteligencia Artificial en las Ventas que se celebraba ayer en el Centro de Congresos de Elche y congregaba a más de 100 personas no lo ha realizado una persona, sino una IA. El presidente de Jovempa Elche, Adrián Antón, cedía el honor de inaugurar -o quizá la IA se tomaba la libertad para hacerlo- este espacio en el que se ha debatido del potencial de la IA para las ventas en empresas, de sus retos de implantación, de regulación, de seguridad, de oportunidades o de idoneidad de incorporarla al tejido empresarial alicantino. Así, Antón ha cedido el papel protagonista de este momento a la inteligencia artificial, pero el resto del debate ha sido mucho más humano en el acto que han organizado Jovempa Elche y Comarca, Jovempa Federación, Elche Emprende y Emplea y el Ayuntamiento de Elche. Este artículo tiene una segunda parte a la que se puede acceder desde este enlace.

Precisamente, desde el Ayuntamiento ilicitano ha tomado la palabra el concejal de Promoción Económica, Formación y Empleo, Samuel Ruiz, quien ha destacado que "este encuentro es una oportunidad para conocer de cerca cómo las empresas están empleando cada vez más la IA en sus estrategias de ventas marcando una diferencia sustancial y significativa en su día a día y posicionándose frente a competidores". El evento ha sido presentado y moderado por el periodista Daniel Gonzálvez.

IA 'made in' Alicante

Entrando en materia, la primera mesa redonda de la mañana fue la de 'Desarrollos innovadores de inteligencia artificial Made in Alicante'. Y son varios los ejemplos que se han expuesto en este encuentro en el que han participado el fundador de Vizologi, Pedro Trillo; el presidente de AlicanTEC y representante de Aguas de Alicante y Centro de inteligencia del Agua, Antonio Sánchez Zaplana; el Technology Delivery Lead Senior Manager de Accenture, Juan Pablo Bonel y el cofundador de foundation.vision, Oliver Montes. 

Hablando de algunos de esos ejemplos, desde Vizologi usan la IA generativa desde 2020 y ofrecen a clientes portfolios de innovación para empresas y opciones de nuevos servicios para ellas. Así, son capaces de generar un plan de negocio de 12 páginas en cuestión de minutos. "Un trabajo que a una persona le puede llevar unas 40 horas lo sintetizamos en ese minuto. El resultado no puede considerarse como un documento final, pero sí una base enriquecida con datos para trabajar con los equipos y desarrollar nuevas estrategias para empresas". Su algoritmo funciona con ChatGPT4 y datos propios. Trillo abogaba, además, por "quitaos el miedo y comenzad a usar la IA con sentido".

Desde Aguas de Alicante, Sánchez Zaplana afirmaba que "ya desde 2013 quienes empezamos a trabajar en este campo que hoy es la IA, lo llamábamos 'caja negra' y esta se aplicaba de formas muy diferentes". Hoy, tienen soluciones de IA innumerables para la zona de Alicante ciudad y comarca que pasan por niveles de ciudad, de clientes y doméstico. El trabajo desde 2013 ha evolucionado y se ha trabajado, también con proyectos europeos. Uno de los ejemplos que destacaba era un plan para mejorar la eficiencia de la temperatura en el uso del agua de la ducha "se suele usar temperaturas muy altas y genera un gran gasto". 

Por su parte, Juan Pablo Bonel, asegura que desde Accenture se da servicio a casi todas las industrias, con desarrollos tecnológicos nativos desde la provincia alicantina. "Uno de los casos en los que hemos ayudado a implementar IA es en una empresa de cultivo de aguacates y mangos". Se recopilaron datos durante 12 semanas para aplicar un modelo para mejorar la productividad y la predictibilidad a tres meses vista. Se ha conseguido un acierto del 87%". Además, Bonel opina que la implementación de la IA "no llevará a pérdidas de puestos de trabajo, sino a mejorar la productividad".

Así, Oliver Montes explicaba que en foundation.vision son expertos en el ahorro de costes logísticos y que usan ahora la IA generativa, aunque "hace años que nos dedicamos al desarrollo de ecommerce". Eso sí, asegura que se vive "una nueva ola con la IA generativa, que ha de ser responsable". Desde su punto de vista, los negocios han de "entender que la IA es una pieza más de software, un medio y no un fin". En concreto su empresa ha logrado, "con unos pocos datos, optimizar un 70% de los gastos de una firma aplicando coherencia en consumos excesivos". 

Los cuatro participantes mantienen que la IA se puede aplicar en cualquier tipo de empresa e industria, sin perder el foco en la formación, la seguridad, la privacidad y la normativa. Y que, si no se implanta, "ya lo harán competidores".

El lado oscuro

No todo son luces en el uso de la IA. También muchas sombras por usos indebidos, y, sobre todo, por la incertidumbre en la regulación y el uso y fuente de datos que usan. Para hablar de la cara menos amable de la IA, el socio fundador de Vilai Abogados, José Barragán, expuso la ponencia 'El lado oscuro de la IA: navegando los abismos del cumplimiento normativo'.

De este modo, comenzaba explicando que la IA ha llegado para quedarse "y que hay que actualizarse para usarla" y también que no existe regulación concreta aún sobre ella. "Todo lo que estamos haciendo se está haciendo mal". De momento, hay propuesta de reglamento a la espera de salir en 2024 "que deberá actualizarse y ya da problemas, porque es difícil regular algo que aún no se ha dado".  

Así, Barragán apuntaba a que al aplicar la IA hay que definir objetivos y expectativas -que se cumplen, como el aumento de ventas- pero también de la normativa vigente -que no se cumple-, de la recopilación y preparación de datos -que tampoco se cumple al no tratarlos de forma correcta-. En se sentido advertía de que "OpenAI se forra a costa de nuestros datos diarios al usarlo, lo entrenamos gratis". También advirtió sobre el cumplimiento ético y legal y la validación, que no se realiza. 

Así, apeló a la necesidad de la evaluación de necesidades y objetivos, al asesoramiento de personal experto y análisis de datos disponibles para su uso correcto. También, del guardado en nubes seguras "y que no tengan los servidores en Estados Unidos o en Canadá". Por otra parte, apuntaba seleccionar la tecnología adecuada para implantar esa IA: "la gratuita no lo es e insistía en la formación y la capacitación, la integración con sistemas existentes para unas ventas correctas. Cumplir con la privacidad y la norma, el monitoreo, la adaptabilidad y la escalabilidad "hará que aumenten vuestras ventas". 

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