Hernández entiende que todo cambio en el modelo de competición ha de ser de cara a la Liga 2021/22

ALICANTE. Mucho está meditando la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) la adopción de una decisión respecto a la terminación del curso 2019/20 en el fútbol aficionado.

Ocho días después de que su presidente, Luis Rubiales, lanzase la propuesta de poner fin a la temporada sin descensos y con un 'play-off' de ascenso exprés, llevando a las 19 federaciones territoriales a reuniones y votaciones, desde Las Rozas lo único que llega es que la cosa no está clara. Esto último está haciendo que el clima se enrarezca por momentos, con plantillas y técnicos lanzando comunicados, muchos clubes amenazando con impugnaciones y no pocas propuestas alternativas o complementarias de la de Rubiales que, obviamente, no dejan a todos satisfechos.

El Hércules fue uno de los primeros clubes de Segunda División B en mover ficha, adheriéndose a una carta firmada por un total de 33 equipos y remitida a la RFEF en la que se solicitaba que de retomarse la competición, fuera para concluir la temporada antes del 30 de junio, algo que en la práctica, teniendo en cuenta la indefinición reinante respecto a la evolución de la pandemia de Covid-19, obligaría a declarar nulo el curso o a resolverlo por la vía rápida, en la línea en la que Rubiales precisamente planteaba horas después su propuesta. Si la citada misiva iba firmada por todos aquellos clubes que tras 28 jornadas se encuentran en la parte baja de la tabla en los cuatro grupos de Segunda B, el pasado lunes trascendía una propuesta de los equipos que se encuentran en la otra mitad de la clasificación, que abogan por la creación de cara al próximo curso de una nueva división, una Segunda B-Pro en la que tengan cabida todos aquellos que clubes que pelean esta temporada por las posiciones de 'play-off' y que finalmente se queden sin ascenso, bien por no llegar a clasificarse para el mismo, bien por hacerlo pero no salir victoriosos de la fase de ascenso.

Preguntado este martes por ese silencio de la RFEF, el presidente del Hércules, Quique Hernández, apostaba "por esperar", confiando en que la decisión de Rubiales sea la de declarar nula la temporada o cerrarla sin descensos o solo con ascensos. El máximo mandatario blanquiazul se mostraba abierto a estudiar "todos los cambios en el modelo de la competición", siempre que sea "por todos, desde el sosiego" y partiendo de la base de que "la decisión final, si se decide cambiar, tendría que ser respecto a la temporada 2021/22".