Hércules-Intercity, bulo

Las fake news no son más que un tipo de pseudo informaciones periodísticas cuyo objetivo es la desinformación y que son diseñadas y emitidas con la manifiesta intención de engañar, manipular o inducir al error a receptores de buena fe, para influir, generalmente, en sus comportamientos. En definitiva, lo que toda la vida hemos conocido como un bulo.

Y bulo es, la espuria información que desde el pasado lunes se está deslizando a través de diversos medios y redes sociales sobre una posible fusión entre el Hércules Cf y el Intercity CF. Bulo en mayúsculas porque jamás ha habido nada, solamente interesa a una parte y tiene dificilísimo encaje legal.

Para que un matrimonio se pueda celebrar (y una fusión de este tipo es como si lo fuera) tienen que estar de acuerdo los dos contrayentes, y en el presente caso, me consta que en el Hércules CF ni se ha contemplado ni se contempla esta opción. Los motivos son muy sencillos ¿Qué gana el Hércules como entidad con esta fusión? Nada. Absolutamente nada. Cierto es, que podría, dicen algunos pseudo expertos (parte importante de toda fake news que se precie) que el Hércules podría subir una categoría. Pues miren, como herculano, y creo que hablo en nombre de muchos, digo bien alto que, no quiero ascender de categoría así. Cuando suba lo quiero hacer gracias a mi aliento como aficionado y al sudor de mis jugadores. No quiero ascender por la puerta de atrás. No quiero atajos, mi orgullo de herculano me lo impide. Orgullo centenario a cambio de un ascenso no merecido. No gracias.

A partir de este momento, donde queda claro que el Hércules no se lo plantea y que muchos aficionados no lo queremos, ¿a quién beneficiaría este bulo? Pues particularmente no lo se, pero está claro que de golpe el Intercity, obtendría una masa social a la que ni a corto ni medio plazo puede aspirar (por motivos obvios y sin que esto suponga ningún desprecio a dicha entidad y su afición), además de un escudo y una historia cuyo valor es incalculable. Intangibles a fecha hoy al alcance de muy pocos clubs en España. La marca “Hércules” esté donde esté es mucho, y no se “regala” por un pírrico ascenso indebido.

Que los herculanos estamos mal, es obvio, pero pido que no nos dejemos engañar por falsos e ilusorios cantos de sirena, que somos lo que somos porque jamás nos hemos vendido y siempre hemos alzado la cabeza por muchos golpes que recibiéramos. Le pido a los herculanos que se expresen como quieran, faltaría más, pero que no se dejen engañar.

Aprovecho también para apelar a los medios de comunicación, que no amparen bulos sin más recorrido que llenar páginas, (para eso ya están las redes sociales) porque en tiempos de zozobra y pesadumbre lo fácil es el populismo y la manipulación. No engañemos a la gente, si rigor no podemos pedir, sí que pido, responsabilidad.

El Hércules está donde se merece, y subiremos cuando nos lo merezcamos. Y que tenga claro todo el mundo, que ese momento llegará, más pronto que tarde, que nadie lo dude. Y lo haremos con el orgullo intacto.

Siempre Hércules. Macho Hércules.