ALICANTE. Una victoria, dos empates y tres derrotas. Cinco puntos de 18 ha sumado el Hércules con Vicente Mir en el banquillo.
Los blanquiazules caían este domingo por 1-3 a manos del Atlético Levante, resultado que unido al empate del Nàstic en Andorra (0-0) hace que los blanquiazules cierren la jornada 22 a cinco puntos de la salvación.
"Números de descenso" en palabras del propio Mir que, eso sí, se mostraba "convencido" de que "el equipo saldrá adelante". El preparador blanquiazul se reconocía muy contrariado por la expulsión sufrida al minuto de juego, una decisión arbitral que entendía que había sido rigurosa, apuntando que lo suyo hubiese sido amonestar solo con amarilla a Pablo Íñiguez.
Esas eran las principales reflexiones de Mir tras el partido de este domingo en el que fue uno de los señalados por la grada tanto durante el mismo como una vez finalizado, especialmente por alguna de sus decisiones como el echar mano del hasta ese momento inédito Nico en detrimento de Olavide, uno de los refuerzos del mercado de invierno; el que, al igual que en Villarreal, volviese a optar sobre la marcha por Pedro Torres antes que por Diego Benito que en esta ocasión no llegó ni a jugar; y el cambio en el descanso en el que dio entrada a Moha por Teo Quintero y pasó a jugar con defensa de tres, una apuesta que duró solo lo que tardó el rival en hacer el tercero y que para revertirla alineó a Felipe Alfonso, un futbolista que está llamado a causar baja.
