ALICANTE. Sandro Toscano se pierde lo que resta de curso.
El mediocentro italiano sufre "una contusión osteocondral en el cóndilo externo, una rotura del cuerno posterior del menisco interno y una rotura del ligamento cruzado anterior en su rodilla derecha". Ese es el dictamen de los servicios médicos del Hércules después de valorar las pruebas radiológicas practicadas al futbolista este martes.
En el parte médico difundido por el club no se informaba de un período de baja, pero sí lo hacía horas más tarde el Sport Clinic, donde Toscano era explorado por eldoctor Pedro Ripoll, que será el encargado de intervenirle el próximo día 20: al futbolista se le realizará una plastia con tendón rotuliano por vía artroscópica, así como una sutura de la lesión meniscal. "A pesar de la gravedad de la lesión que sufre en la rodilla, somos muy optimistas en cuanto a la recuperación", decía Ripoll, apuntando a un tiempo de baja aproximado de ocho meses.
Toscano recaló en el Hércules en el pasado mercado de fichajes de verano y cuenta con contrato hasta junio de 2022, aunque este es ampliable por un año en caso de ascenso.
En la plantilla de Sergio Mora no hay otro futbolista de su perfil, por lo que estamos ante un serio contratiempo que el club blanquiazul puede tratar de superar firmando a un 'parado', pero no cualquiera por varias razones extradeportivas.
Desde la temporada pasada, en el Reglamento General de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ya no se contemplan los supuestos de 'lesiones de larga duración', con base a los que los clubes podían reemplazar a jugadores que sufrieran una dolencia cuyo tiempo de baja fuera superior a cinco meses fichando a otro con contrato en otro equipo o que estuviera en paro fuera de los períodos establecidos de manera ordinaria (mercados de verano e invierno). Ahora bien, como en el artículo 124 se sigue recogiendo la posibilidad de inscribir futbolistas en paro fuera de esas ventanas de fichajes, el Hércules puede fichar a un jugador en situación de desempleo... incluso si no tiene licencias libres, como es su caso: la RFEF viene permitiendo que los equipos que no tienen licencias libres y que necesitan fichar por tener un jugador lesionado, le den la baja federativa a este (el Reglamento establece "períodos de inscripción" pero no "de cancelación de licencias", por lo que estas se pueden producir durante toda la temporada) y usen su licencia para inscribir a otro, comunitario o extracomunitario (tanto sénior como sub-23), que a la finalización de la última ventana de fichajes estuviera en situación legal de desempleo en el caso de aquellos con licencia aficionado o cuyo contrato hubiera vencido antes del cierre del mercado en el caso de los que cuenten con licencia profesional, tal y como exige el Reglamento General.
Ahora bien, la deuda en situación irregular que mantiene el Hércules con la Agencia Tributaria le limita a reforzarse con un futbolista comunitario: los extracomunitarios requieren de permiso de residencia y trabajo y por culpa de la citada deuda el club blanquiazul es insolvente a ojos de la Administración, por lo que esta no considera 'válidas' sus ofertas de trabajo (el futbolista necesita presentar una oferta de trabajo para la obtención del citado permiso). Otra cosa es que el 'parado' extracomunitario hubiera estado jugando la temporada pasada en España y contara todavía con el citado permiso, pues se conceden por un año. Eso sí, el problema llegaría entonces cuando caducara.
Además, al ser sénior la licencia que dejaría libre Toscano, el hipotético sustituto también tendría que ser mayor de 23 años.
Nico Espinosa
En el partido ante el Socuéllamos también se retiraba antes de tiempo Nico Espinosa, en su caso por "una rotura miotendinosa del músculo semimembranoso izquierdo de grado II".
Así versa el parte médico difundido por el club, cuyos servicios médicos no señalan período de baja aproximado, pero todo indica que el extremo estará mes y medio en el dique seco.
