ALICANTE. Emprendedores que están dejando de serlo para dar un paso más allá. Esta es la fase en la que están ahora mismo los promotores de G&G Trading Company, una compañía especializada en la importación y distribución de productos singulares de América como la quinoa real. Tras seis meses como S.L., llegó la hora de modificar el modelo de negocio para incorporar el feedback obtenido limando las limitaciones de su proyecto empresarial inicial. Se pasará de la venta al por mayor a la ampliación del negocio con la creación de una marca dirigida a un público minorista selecto interesado en la alimentación sana.
La confianza depositada en su principal producto, la quinoa real, se debe a la historia que hay detrás de este producto. La materia prima es proporcionada por una cooperativa de agricultores bolivianos de la remota región del Altiplano andino, aislada de la civilización. Son los productores los que marcan un precio justo para cubrir gastos y generar los suficientes beneficios para la comunidad local que les permitan mantener su estilo de vida tradicional. No hay mediadores ni intermediarios entre G&G Trading Company y estos agricultores y son ellos los que se llevan la mayor parte del beneficio de su trabajo. El producto cumple, por tanto, los parámetros del comercio justo y dispone de los certificados orgánico y ecológico para la CE, Frairtrade, Bolicert y la Denominación de Origen Quinoa Real Altiplano Sur de Bolivia.
“Los agricultores han establecido un límite en los precios y nosotros también tenemos un límite moral. Hemos rechazado trabajar con grandes compañías para respetar las condiciones de la cooperativa boliviana que quiere mantener un ritmo de cultivo adecuado para no explotar la tierra”, explica Roberto Gómez, uno de los tres propietarios de G&G Trading Company.
La quinoa real importada por G&G Trading Company es una semilla ecológica con denominación de origen. Se cultiva a 3.700 metros de altura sin máquinas, siguiendo un proceso de tradición milenaria que dota al producto de ventajas en cuanto a mejor calidad, más propiedades nutritivas o mayor tamaño y sabor en comparación con otros tipos de quinoa. Se producen unas 750 toneladas por hectárea, muy por debajo de las 50.000 que se consiguen en otras zonas sobreexplotadas. Toma el nombre de real por haber sido alimento preferente en la dieta de la nobleza andina.
La idea inicial del proyecto empresarial es de Roberto Gómez, natural de Bolivia, quien ha viajado hasta región del Altiplano para buscar un acuerdo que permita traer a Europa esta variedad de quinoa real respetando los criterios de la comunidad productora. Se trata de un proyecto propio que ha llevado a cabo animado por sus socios Jonathan George y Adrián Amat.
Con una inversión inicial de 3.000 euros y una ampliación de capital hasta los 25.000 euros, la empresa alicantina G&G Trading Company lanzará en enero su nueva marca y su primera tienda online. Estrenará además una nueva red de distribuidores asociados.
“Es como empezar otra vez desde cero. Ahora estamos en pleno proceso de creación de una nueva logística y nueva imagen y empaquetado”, explica Roberto Gómez. La previsión para los próximos ejercicios es alcanzar una venta de 15 toneladas de quinoa real al año para el mercado minorista en España y poco a poco introducir derivados como quinoa negra y roja o inflada, novedosas en nuestro país, y otros productos como el aceite de oliva virgen extra de Alicante. Con un precio de aproximadamente 8 euros el kilo de quinoa real pretenden competir con una buena relación calidad-precio y obtener en 2018 los primeros beneficios de al menos 25.000 euros.
Los grandes competidores de G&G Trading Company son otras compañías comercializadoras de quinoa real y la quinoa sin denominación de origen que ya se encuentra en numerosas superficies comerciales. Ahora mismo no buscan inversores, pero si están abiertos a negociar con colaboradores, distribuidores o empresas que quieran comercializar este singular producto de Bolivia.
Tras meses de intentar trabajar sólo con grandes empresas distribuidoras, los promotores de esta compañía se han dado cuenta de que cada vez reciben más peticiones de consumidores y pymes interesadas en comprar pequeñas cantidades de la quinoa real que sólo ellos distribuyen en España. Las singulares características del producto se han convertido en una de sus ventajas competitivas para su público objetivo, formado por personas que dan prioridad a una alimentación sana y natural y a la calidad y la sostenibilidad. Entre ellos están deportistas, tiendas y supermercados naturistas o herbolarios, consumidores de productos ecológicos, establecimientos de hostelería, consumidores de productos sin gluten o ciudadanos americanos residentes en España.
“Los consumidores notan la diferencia entre esta quinoa real y otras”, explican, conscientes de que queda mucho por hacer para dar a conocer las bonanzas de un producto aún minoritario en España. Esta semilla es una alternativa al arroz o al cuscús que se emplea para hacer sopas, tabule o ensaladas.