VALÈNCIA (EP). El Producto Interior Bruto (PIB) de la Comunitat Valenciana crecerá en 2024 el 2,4%, lo que supone una décima menos que la media nacional, según Funcas. La principal contribución procederá del turismo, pero también la construcción exhibirá mayor dinamismo que la media.
Se estima que el crecimiento del PIB de la Comunitat Valenciana en 2023 fue del 2,2%, también favorecido por el impulso del turismo, señala Funcas, que recuerda que se trata de la comunidad autónoma, de entre las grandes receptoras de turismo, donde más ha aumentado el número de visitantes en comparación con 2019, con un crecimiento del 9,8% respecto al nivel prepandemia.
En cuanto al empleo en términos de la EPA, auguran que crecerá un 2,2%, mientras que la tasa de paro se reducirá hasta el 11,9%, superior a la media nacional.
Y, en cuanto al saldo de las cuentas públicas, la comunidad valenciana registró el déficit más alto tanto en 2022 como en 2023, con un desvío del 3,05% y del 2,45% del PIB, respectivamente.
Funcas ha dado a conocer en rueda de prensa las previsiones económicas de las comunidades autónomas para este año 2024, donde estima que la media del crecimiento del PIB nacional está en el 2,5%.
En concreto, Funcas ha situado a Canarias, Baleares y Madrid como las tres comunidades autónomas que liderarán el crecimiento económico en 2024, con previsiones de un alza del Producto Interior Bruto (PIB) superior al 3% en el caso de las islas y del 2,6% en la región capitalina. La media nacional se sitúa en el 2,5%.
De acuerdo con estas previsiones, hay dos comunidades que se sitúan en paralelo a la media nacional del 2,5%: Cataluña y Aragón. Por su parte, Andalucía, Galicia y Comunitat Valenciana tendrán un crecimiento del 2,4%.
También por debajo de la media se sitúan Navarra, País Vasco Castilla y León (2,3%); Cantabria (2,2%); Extremadura, Castilla-La Mancha (2,1%); Murcia (2%); La Rioja y Asturias (1,9%).
Como ha explicado el director general de Funcas, Carlos Ocaña, estas previsiones "son consistentes con la senda de crecimiento sostenido de la economía española, liderado por los sectores exportadores y los servicios de mercado".
Algunas de las comunidades con un PIB per cápita inferior a la media se encuentran entre las que más han progresado, como es el caso de Andalucía, Asturias, Castilla y León y Galicia. Otras, sin embargo, como Canarias, Comunitat Valenciana y Murcia, apenas se han acercado a la media nacional en PIB per cápita, "por el golpe del turismo sufrido durante la pandemia".
"La convergencia se produce en general como consecuencia de incorporar más fuerza laboral (elevando la tasa de ocupación) y no por un aumento de la productividad en las regiones más rezagadas", ha declarado el director de coyuntura de Funcas, Raymond Torres.
Desde el comienzo del episodio inflacionario en enero de 2021 hasta junio de este año, el IPC se ha incrementado un 19,1%. Sin embargo, este aumento del nivel general de precios ha sido desigual por CCAA.
En Castilla-La-Mancha, Galicia y Castilla y León, la subida del IPC supera el 20% mientras que en Madrid y Cataluña no llega al 18,5%. La subida del coste del transporte ha podido incidir con más intensidad en la cesta de la compra de las comunidades con más dispersión de población que en los territorios caracterizados por una alta concentración urbana.
En estos últimos, además, las condiciones de competencia han podido amortiguar el traslado del shock de costes a los precios finales. El efecto composición del IPC, con distintas ponderaciones de los bienes y servicios en las CCAA, parece haber sido limitado en general.
En todo caso, los diferenciales de IPC no se corresponden con la evolución de los salarios, que parecen haber crecido de manera más uniforme, de lo que se deducir que el poder adquisitivo de los consumidores no se ha resentido por igual en las diferentes regiones.
Desde principios de 2021 hasta junio de este año, la afiliación se ha incrementado un 13,6%, y el número de ocupados en términos de EPA un 10,4% (comparando, en este último caso, los primeros trimestres de 2024 y 2021).
Este buen comportamiento del mercado laboral se percibe, en mayor o menor medida, en todo el país. Todo ello ha permitido que la tasa de paro en términos de EPA se sitúe por debajo de los niveles anteriores a la pandemia en todas las comunidades (salvo Navarra, donde ya era relativamente bajo, con una comparación del primer trimestre de 2024 con el mismo periodo de 2019).
En 2023, la tasa de paro había descendido del doble dígito en ocho comunidades y la previsión para 2024 es que lo haga en 10: Aragón, País Vasco, Cantabria, La Rioja, Baleares, Cataluña, Galicia, Castilla y León, Madrid y Navarra.
Por otra parte, el paro ha tendido a reducirse de manera más acusada en las comunidades con más desempleo, como Andalucía, Canarias, Castilla-La Mancha y Extremadura, apuntando a un proceso de convergencia territorial en términos de empleo.