ELCHE. Fiel al guion. No obstante los 38 puntos y el colchón de 8 más el coeficiente particular de goles con respecto a la zona de descenso que tiene su equipo, cuando restan solo cinco jornadas por disputarse, Francisco Rodríguez huía de confianzas e insistía en que todavía no se puede dar por conseguido el ansiado objetivo de la permanencia en LaLiga Santander.
Lo más que reconocía el técnico almeriense del Elche, en su comparecencia previa al choque ante el Osasuna del domingo, es que lograr tres victorias consecutivas (lo que supondría derrotar a los rojillos, ya que vienen de imponerse a Mallorca y Betis en las dos últimas jornadas) "sería señal" de que van a estar "otro año más en Primera", que "los tres puntos" les darían "prácticamente la permanencia": "Todavía no hemos conseguido nada y hasta el último día voy a trabajar a 'full' porque quiero ganar todos los partidos que quedan de aquí al final", decía.
Como "un partido muy importante, que preparamos sin confianza ninguna, a conciencia", definía el choque ante el Osasuna, al que se refería como "un equipo muy bueno, que hace muy bien las cosas y está donde está por algo [...] ha sumado más puntos como visitante que como local, juega mucho en campo contrario, es muy ganador en los duelos, lleva mucho tiempo trabajando con Jagoba (Arrasate)". Francisco, que llegaba a confesar que le ha costado "mucho" analizar a su rival, confirmaba que el delantero Guido Carrillo entrará en la convocatoria, mientras que habrá que esperar a la siguiente jornada para que su compatriota Lucas Boyé pueda hacer lo propio: "Tiene una evolución bastante buena, estamos acortando los plazos y se incorporará la próxima semana al trabajo del grupo", decía respecto al atacante ítalo-argentino.
Con un "llevamos dos (victorias) de dos (partidos), si no jugamos igual me vais a llamar loco", zanjaba por la vía rápida el técnico franjiverde el debate sobre si seguirá apostando por el sistema (1-5-4-1) de las últimas jornadas, al tiempo que ponía el acento en "el buen ambiente" y "predisposición por parte de todos" cuando se le interpelaba por la posibilidad de introducir cambios en el once, no obstante mantener la apuesta táctica de las dos últimas jornadas, al tiempo que advertía que "es difícil" que el del domingo sea un encuentro que se cierre con un resultado "como el del día del Mallorca" porque van a enfrentarse "a un rival que nos va a someter en muchos momentos".
Francisco lamentaba que el día y hora fijado para la disputa del choque pueda afectar a la afluencia en las gradas, pero ni se mostraba dispuesto a que lo anterior le vaya a restar importancia a la cita para los suyos, ni tampoco preocupado excesivamente por el calor que se prevé que haga a las 14 horas del domingo: "Es un día muy especial, el horario no invita mucho y hará calor, pero afectará a los dos equipos por igual y debemos conseguir el objetivo por los que estén", sentenciaba.
Renovación e interés de terceros en algunos de sus futbolistas
Huelga decir que, si todavía no da por conseguida la permanencia, el técnico del Elche tampoco se mostraba especialmente dicharachero a la hora de referirse a su hipotética continuidad en el cargo: "Estoy muy a gusto aquí, el club entiendo que también conmigo; la comunicación es fantástica, pero todavía no ha llegado el momento de sentarse", señalaba Francisco respecto a la negociación sobre su renovación de contrato, al tiempo que celebraba ("El equipo está haciendo muy bien la cosas, estoy muy orgulloso") que jugadores de la plantilla puedan contar con ofertas de otros equipos, aunque también precisaba que no está muy pendiente de la "rumorología".
