ALICANTE. Los actos institucionales previos a la conmemoración del 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, ha vuelto a evidenciar este viernes la división política existente en el Ayuntamiento de Alicante respecto a cómo afrontar medidas para combatirla. De este modo, el equipo de gobierno, del Partido Popular (PP), no ha contado con la participación de ningún representante de los grupos de la oposición en la colocación de la tradicional pancarta conmemorativa de la efeméride instalada en el balcón principal del edificio histórico del Ayuntamiento, y tampoco en el desarrollo del acto protocolario posterior, celebrado en el Salón Azul.
Los tres grupos del eje progresista que ejercen funciones de oposición -PSOE, Compromís y Esquerra Unida Podem- han optado por protagonizar su propio acto por separado en señal de repulsa por la gestión, a su juicio errónea, desplegada por el PP en materia de igualdad que se manifestaría en hechos concretos como la reducción de la partida presupuestaria destinada a ese área, el retraso en la confirmación de la disponibilidad de un punto violeta frente a los abusos sexuales en la celebración de la fiesta de Nochevieja, en la firma de acuerdos con formaciones que niegan la violencia de género o en el mantenimiento de la ordenanza de convivencia que incluye sanciones a mujeres forzadas a ejercer la prostitución, según han detallado la edil del PSOE, Victoria Melgosa; la edil de Compromís, Sara Llobell; y el portavoz de Esquerra Unida Podem, Manolo Copé.
Por último, los cuatro ediles del grupo municipal de Vox se han vuelto a ausentar del acto. Fuentes del partido han señalado que "nosotros no hacemos distinciones entre víctimas. Todas las víctimas tienen que ser tratadas igual ante la ley da igual el género del que se trate. No vamos a hacer propaganda a esta política de izquierdas ideológica, que favorecen el trato desigual de los españoles, y que lo único que ha hecho es soltar a miles de violadores poniendo a las mujeres en un peligro latente diariamente".
Por partes. En esta ocasión, el acto institucional promovido por el equipo de gobierno ha puesto el foco en la violencia vicaria: la que se ejerce a través de los hijos para dañar a la mujer. En esta línea, los concejales del PP han desplegado una pancarta desde el balcón del Ayuntamiento para visibilizar el rechazo a la violencia de género. A continuación ha comenzado un acto institucional en el Salón Azul, que ha contado con la participación de dos víctimas de violencia vicaria, María Teresa Álvarez y Carmen González, que llevan años sin poder ver a sus hijos y han fundado la asociación 'Libres de Violencia Vicaria'. Ambas han realizado un llamamiento para que la sociedad tome conciencia de este tipo de violencia, según han detallado fuentes municipales, a través de un comunicado.
Minutos antes del desarrollo del acto, el alcalde, Luis Barcala, ha señalado que es "importantísimo visibilizar un problema que va en aumento y que nos preocupa mucho". Ante esta realidad, el primer edil ha reflexionado sobre la eficacia de las políticas "que siempre hay que revisar tratando de lograr el objetivo, erradicar una lacra social que es inaceptable". Barcala ha señalado que "es dolorosísimo y sientes vergüenza cuando tienes que dar cuenta de las víctimas cada mes", en alusión a la lectura a la que se da trámite en el inicio de cada sesión del pleno de la corporación respecto a los casos de violencia de género registrados en el transcurso de cada mes.
En este sentido, el primer edil ha insistido en que "es una cuestión de todos, no podemos bajar la guardia. La sociedad debe concienciarse de que no cabe la violencia de género. Es de una cobardía tal que el hecho de que se produzcan casos es síntoma de que tenemos como sociedad una parte enferma que necesitamos urgentemente curar", ha añadido.
Al tiempo, ha lamentado la ausencia del resto de los partidos de la oposición a la hora de desplegar la pancarta desde el balcón del Ayuntamiento de Alicante. "Yo lo único que puedo decir es que sigamos unidos en una cuestión que nos preocupa exactamente igual a todos y me parece que hacer esos distingos es querer distinguirse subiéndote a los hombros de un problema que es de todos", ha señalado. "La imagen que agradecería toda la sociedad es ver a todos los políticos unidos desde el balcón del Ayuntamiento que nos representa a todos; el que no quiera sumarse, tendrá que explicar por qué no se suma, pero es complicado decir que no te sumas a algo que nos importa a todos", ha concluido.
Por lo pronto, los tres representantes de la izquierda han justificado su posición al margen del PP con sus respectivas argumentaciones justificativas. En primer término, la edil socialista, Victoria Melgosa, ha señalado que "las políticas de igualdad que lleva a cabo el equipo de gobierno es suprimir la Concejalía de Igualdad, reducir su presupuesto en un 75%, e incluso han intentado quitar los puntos violeta para esta Nochevieja, plegándose al negacionismo de la ultraderecha", ha explicado.
La edil de Compromís, Sara Llobell, ha incidido en que "las políticas públicas contra la violencia de género deben aplicarse durante todo el año y este equipo de gobierno no lo hace porque elimina la Concejalía de Igualdad, porque devuelve dinero del pacto de Estado contra la violencia de género, y porque pacta con quien niega la violencia machista; ese discurso es el que tira gasolina al discurso de la violencia", ha señalado. Así, ha explicado que, "por coherencia, no podemos compartir este acto con ellos".
Por último, el portavoz de Esquerra Unida Podem, Manolo Copé, ha señalado que el PP estaba escenificando "un compromiso estético contra la violencia de género cuando el compromiso debe ser ético y debe pasar por líneas presupuestarias y por la retirada de la ordenanza de convivencia, que vulnera los derechos de las mujeres que están en situación de prostitución". "Hemos decidido plantar cara a las políticas que suprimen la Concejalía de Igualdad y que no tienen una política real contra la violencia de género", ha concluido.
Ya en el acto institucional celebrado en el Salón Azul, María Teresa Álvarez ha explicado que la violencia vicaria "se ejerce para mantener el control sobre la mujer, mientras que Carmen González ha alertado de sus consecuencias: "Miedo, tristeza, impotencia y duelo permanente que destroza la vida a madres e hijos".
La concejala de Derechos Públicos, Begoña León, ha manifestado que este año "hemos querido poner el foco en la que es la gran desconocida dentro de la violencia de género, porque sólo se nombra cuando ha llegado al extremo fatal del asesinato, pero la violencia vicaria la sufren mujeres, familiares y amistades en muchos más casos de los que pensamos". León, de cuyo departamento depende Igualdad, ha abogado por "crear leyes más efectivas, sistemas de apoyo adecuados y educar a la sociedad para abordar esta forma insidiosa de violencia que tiene consecuencias devastadoras". "La violencia vicaria se manifiesta cuando el agresor utiliza a sus hijos como herramienta de control y manipulación sobre la víctima y todo esto, puede incluir amenazas de hacerles daño, privarles de afecto o incluso usarlos como instrumento para seguir hostigando a la víctima", ha añadido la edil.
La concejala ha recordado que en lo que llevamos de año 52 mujeres han sido asesinadas en España, cuatro de ellas en la Comunidad Valenciana, dos en la provincia. En este sentido, ha explicado "desde la concejalía trabajamos de forma incesante y constante para que la cifra de mujeres asesinadas o que sufren violencia cese".
En el acto ha intervenido también Raquel López Cascales que ha relatado una historia de violencia vicaria, se ha proyectado un vídeo con testimonios y ha abierto y cerrado el acto la interpretación de dos piezas de piano y flauta.
Al tiempo, fuentes municipales han precisado que, dentro del departamento de Igualdad de la Concejalía de Derechos Públicos, el servicio de asesoramiento jurídico en violencia de género ha atendido 192 consultas, la mayoría presenciales, en lo que llevamos de año. El servicio de atención psicológica ha trabajado en diagnóstico e intervención en más de 350 entrevistas psicoterapéuticas y las trabajadoras sociales han atendido casi 400 casos.
Por su parte, el Gabinete de Atención a la Víctima de Violencia Doméstica de la Policía Local de Alicante (Gavid) ha atendido 572 casos, de los que 228 continúan en seguimiento.