Acto de presentación del proyecto de Levante Interior, en Villena / Foto: Rafa MolinaVILLENA. Suelo más económico e infraestructuras ya desarrolladas. Estas son dos de las potencialidades que presenta Villena para acoger el Puerto Seco, a través de su proyecto Levante Interior. Así lo ha trasladado a Alicante Plaza el alcalde de Villena, Fulgencio Cerdán, durante el acto de presentación del nodo este jueves 15 de diciembre, en un evento que ha tenido lugar en la Comunidad General de Usuarios del Alto Vinalopó y al que han asistido representantes empresariales e institucionales de las provincias de Alicante, Valencia, Murcia y Albacete.
Aunque nunca se ha buscado una rivalidad entre el proyecto de Villena y el de Novelda, por entender que trasciende de lo local a lo europeo, es cierto que el Puerto Seco proyectado en Villena se lleva gestando desde hace alrededor de 15 años, mientras que el de Novelda se empezó a trabajar hace tres. "Novelda tiene su proyecto, que seguro que está muy bien armado, y nosotros tenemos el nuestro. El proyecto de Villena está trabajado desde mucho antes", ha declarado Cerdán, matizando que el precio del suelo es "más económico" y que las infraestructuras ya existen: "Las conexiones con la autovía están hechas y el desarrollo urbanístico puede ser más sencillo".
Precisamente, el suelo donde se va a desarrollar el proyecto consta como rústico y se deberá recalificar como industrial, asunto sobre el que el primer edil ha confirmado reuniones con la Conselleria para tratarlo como Proyecto de Inversión Estratégica Sostenible (PIES). En concreto, hay dos: el de la Zona de Actividades Logísticas (ZAL), que ya está "encima de la mesa de la Conselleria", y un PIES que se generaría y "salvaría el problema de tramitación a través de licencia municipal" para recalificar el suelo, necesario para el intercambiador.
Fotos: Rafa Molina
Cuando se resuelva el primer PIES -el correspondiente a la ZAL-la constructora, Echo XXI, empezaría a urbanizar la zona y, el segundo paso, sería que un operador "dé su nombre para ponerla en marcha, porque los operadores nos trasladan que si no tienen una fecha cierta de cuándo se va a pasar el Corredor Mediterráneo por Villena, no pueden hacer previsiones a la hora de invertir". Sin embargo, Cerdán ha asegurado que, cuando el Ayuntamiento tenga una fecha, "está todo hablado para que se ponga en marcha. Incluso están hechos los estudios de carga y el número de toneladas mínimas para transportar para que fuera viable esta instalación".
Además de las candidaturas alicantinas para acoger el Puerto Seco, Albacete también proyectó uno, con el que el alcalde de Villena ha confirmado cierta reciprocidad: "Es un proyecto que puede beneficiar mucho a toda esta zona del interior de la provincia de Alicante, de Valencia y de las zonas colindantes de Murcia y Albacete", ha destacado. "En las poblaciones medianas que estamos en el interior, con el tiempo vamos a sufrir esa despoblación", por lo que Cerdán apuesta por un proyecto que creará "puestos de empleo de calidad en este territorio".
Fotos: Rafa MolinaEl nodo logístico del Levante Interior es un proyecto que nace junto al desarrollo del Corredor Mediterráneo y que se extenderá en una superficie aproximada de 1.725.000 metros cuadrados, configurado por el parque empresarial de Bulilla, la nueva Zona de Actividades Logísticas, la terminal intermodal y la zona de servicios especializada. El nodo logístico contará con una estación de mercancías para trenes de 750 metros de longitud, reserva de suelo para la implantación futura del sistema de autopista ferroviaria ferroutage y grandes parcelas para la industria logística de hasta 280.000 m2.
En particular, el Puerto Seco o Estación Intermodal de Mercancías tendrá una superficie de 375.000 m2 y estará configurada por la estación ferroviaria de mercancías, un área para instalaciones especializadas o individuales para operadores logísticos, un área de aparcamiento para camiones y servicios, un área para almacenaje de contenedores y un área de control de accesos y recinto aduanero.
El impacto socioeconómico de este proyecto se estima en 833,4 millones de euros (117,1 millones en fase inicial y 716,3 millones en fase de explotación), de los cuales 607,3 millones se trasladan a la economía, mientras que 217 millones corresponden a los efectos inducidos en la economía del proyecto. Además, se espera que genere 920 empleos anuales en fase de ejecución y 6.000 estables en fase de explotación.
