La gerente de Finar Spain, Tania Cristina da Cruz, en una imagen de archivoALICANTE. La volatilidad que define al sector de la piedra natural, vinculado siempre a la marcha del sector de la construcción doméstico y a la capacidad exportadora de las empresas, tan pronto depara grandes noticias sobre la buena marcha de una firma alicantina como sorprende con su desaparición. Los gigantes del sector como Levantina pueden soportar un par de ejercicios consecutivos en pérdidas, como es el caso, pero otras empresas de menor tamaño no tienen más remedio que ir a liquidación.
Es lo que le ha sucedido a Finar Spain, una joven firma marmolera de Petrer, que ha pasado en solo dos años de ser premiada por su capacidad exportadora y la apertura de nuevos mercados a echar el cierre tras un concurso de acreedores que no ha podido superar. El Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme) ha publicado la apertura de la fase de liquidación, dos meses después de que la firma regentada por Tania Cristina da Cruz solicitase el concurso voluntario.
Finar Spain nació hace siete años en Petrer, en la cuna del mármol de la provincia de Alicante, con la empresaria hispano-brasileña afincada en la localidad y el inversor árabe Ali El Khatib, propietario a su vez de la inmobiliaria Trust Levante S.L. Desde un primer momento, Finar Spain se volcó en el mercado exterior, y especialmente en los países árabes, donde abrió una importante vía de negocio. Especializada en Oriente Medio y Extremo Oriente, la firma llegó a facturar cerca de 5 millones de euros en 2014, su mejor ejercicio, tras duplicar su volumen de ventas en solo tres años. En ese momento la plantilla superaba la media docena de personas.
En 2015, la plataforma empresarial Unidos 8 de Marzo que preside Sandra Torrighelli premió a Finar Spain y a su gerente por su capacidad exportadora, en la gala anual celebrada en abril de ese año. Da Cruz recogió el premio de manos del entonces alcalde de Petrer, Pascual Díaz. Menos de dos años después, el pasado febrero, Tania Cristina da Cruz tenía que pedir el concurso voluntario de acreedores, tras una caída de más del 20% en sus ventas (facturó 3,7 millones en 2015) y estrangulada por la deuda financiera de la firma con cinco entidades. El hundimiento de las ventas llevó a la mercantil a unas pérdidas de -458.695 euros el pasado año.
El juez de lo Mercantil número 1 de Alicante designó administrador concursal a la mercantil De Iure Administradores Concursales, que en solo dos meses ha optado por pedir la liquidación, al no haber activos suficientes para hacer frente a las deudas de la sociedad. El activo de Finar Spain se calcula en unos 3 millones de euros, según el último balance depositado en el Registro Mercantil.
La quiebra de la empresa llegaba antes incluso de que las protestas de los estibadores afectasen de lleno al sector de la piedra natural alicantina, que envía las exportaciones a través del puerto de Valencia. A finales de marzo, la asociación empresarial Mármol de Alicante ya advertía de que el conflicto de la estiba estaba pasando factura al sector, al retrasar la salida de la mercancía ya vendida y demorar el cobro de los contratos, lo que podría terminar afectando también al empleo.
Tania da Cruz, en el centro de la primera fila, en la gala en la que fue premiada
