BENIDORM. Empresarios valencianos promueven las obras de un edificio de Benidorm que quedó inacabado por la crisis del ladrillo. Se trata de la mercantil Anfusal, con sede en València y vinculados a la promoción inmobiliaria en la Comunitat Valenciana. El edificio en cuestión se encuentra en la avenida 9 de Octubre, frente al Parque de Foietes. Conocido por muchos al no pasar desapercibido por su fachada de colores. Cuenta con 13 plantas y en la actualidad se encentra en obras para su finalización y puesta en venta.
La concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Benidorm, Lourdes Caselles, explicó a este diario que ya cuentan con licencia de obra. Es más, los trabajos ya están siendo ejecutados a través de la empresa vilera Infinobras, que será la encargada de terminar el inmueble.
Como se decía, el edificio fue abandonado a falta de terminarlo en un bajo porcentaje sobre el total del inmueble. El inicio de su promoción se remonta a hace alrededor de 15 años, cuando aun no existía el parque de Foietes y se asentaba frente a una zona sin desarrollar con salida a un descampado y un parking de coches en gran parte de tierra. En aquellos momentos, la crisis del ladrillo era una realidad que golpeó al residencial durante su construcción y hasta ahora. Deste entonces, ha estado sin actividad e incluso sin entrada convencional a la urbanización, rodeada de un muro tapado por lonas verdes.
Nació bajo el nombre de 'Bulevar IV'. Una promoción de 23 viviendas a la que se le añadía un parking "aéreo" y techado, anejo a la construcción, según la publicidad en aquel momento. Se incluía además dos sótanos con cabinas y trasteros así como piscina, que ya se puede ver terminada en un extremo de la urbanización.
Anfusal será la encargada de darle vida a este colorido edificio, situado en uno de los parques más conocidos en la ciudad y a escasos metros del centro y de la playa de Poniente. Según ha podido saber Alicante Plaza, la empresa está participada por Maria Dolores Fuster Soler y Salvador Andrés Sales con una división al 50%. Sin embargo, el director de la misma es el hijo de ambos, Salvador Andrés Fuster.
Ambos son conocidos en la capital. Salvador padre fue uno de los inversores de Valcapital, primera sociedad gestora independiente de capital valenciano que desapareció en 2013. Por otro lado, la familia Fuster se hizo un nombre en la ciudad después de que Ricardo Fuster fuera el impulsor de las granjas y lácteos de las que Danone llegó a comprar acciones para la elaboración de sus productos. Una alianza que le permitió ser presidente de la compañía española de 1984 a 1999.