ELCHE. Después del auténtico vía crucis que ha supuesto la actuación en la calle Nuestra Señora de la Cabeza, en la que tuvo que entrar finalmente el Ayuntamiento para culminar las mismas y recoger el material de obra que había quedado en Candalix, Contratación tendrá que iniciar de nuevo el expediente de rescisión del contrato con la adjudicataria. Todo porque por una cuestión de criterios, desde el Ayuntamiento se pensaba que el plazo para ejecutar el expediente era de ocho meses, sin embargo la legislación vigente establece que son tres. En cualquier caso, la afección directa es sobre los trámites administrativos, con los que el Consistorio ha acordado incautar el aval que entregó la mercantil.
En este sentido, según han confirmado fuentes municipales, el Ayuntamiento tiene que declarar la caducidad del procedimiento de resolución del contrato de obras de reurbanización, de forma que tendrá que iniciarlo de nuevo. Todo viene por una cuestión de interpretaciones, ya que desde Contratación se estimaba que el plazo para instruir y resolver la resolución era de ocho meses según una sentencia del Tribunal Constitucional sobre la Ley de Contratos. Sin embargo, el Consell Jurídic Consultiu, que se pronunció porque es lo que procede cuando hay una resolución unilateral —la mercantil presentó alegaciones que fueron rechazadas—, sostiene que son tres, que es lo que indica la ley, ya que tampoco la Generalitat cuenta con una norma específica en materia de contratación del sector público que prevea el plazo para la tramitación de estos procedimientos. La Junta de Gobierno excedió el plazo para declarar la resolución, que tuvo lugar en noviembre, pero debió ser en septiembre.
No obstante, aunque se declare la caducidad de este expediente, el Ayuntamiento puede iniciar uno nuevo conservando aquellas actuaciones y trámites realizados originalmente. Entre ellos estaría la incautación de la fianza definitiva depositada, como se planteó en el primer informe para que la Tesorería municipal procediese a ejecutar el aval depositado por importe de 10.904,83 euros. Como señaló el Secretario, cuando el contrato se resuelva por "incumplimiento culpable del contratista le será incautada la garantía y deberá, además, indemnizar a la Administración los daños y perjuicios ocasionados en lo que excedan del importe de la garantía incautada".
En retrospectiva, la obra fue adjudicada en mayo de 2020 a Edifica Vías e Infraestructuras por 263.896,98 euros y cuatro meses de plazo, para una intervención llamada a ser emblemática al ser una de las vías de acceso al corazón de la ciudad. Sin embargo, a pesar de los problemas, aún quedan cuestiones pendientes de instalar, como las luces LED planteadas en el diseño. De hecho, hasta hace unas semanas aún había restos de obra en el aparcamiento de Candalix que abandonó la empresa. Desde el inicio de las obras en agosto, se amplió el plazo dos veces, manifestando ya informes técnicos en mayo de 2021 que la obra estaba sin terminar, según argumentos de la contratista, por falta de material para acabar la pavimentación, añadiendo le informe que incluso apenas había personal en las últimas semanas. Así rezaba:
Desde el lunes 10 de mayo, se ha paralizado completamente la obra y no hay ningún trabajador. La jefe de obra ya no forma parte de la empresa contratista y por lo tanto ha abandonado la obra. Las zonas por terminar implican cierto riesgo, por lo que es urgente su finalización y que no se demoren en el tiempo. Hay una zona sin pavimentar que implica la interrupción del recorrido peatonal de la acera este, por lo que el peatón tiene que pisar la calzada. Por otro lado, en la zona que queda por asfaltar hay arquetas que sobresalen del asfalto actual, pudiendo producir tropiezos para peatones o problemas para los vehículos.
Se detectaron diferentes deficiencias en la obra, y que implicaban ciertos riesgos. Por un lado, las señales colocadas en la acera del colegio quedaron muy cercanas al bordillo, y los autobuses chocaban contra ellas al pasar. La señal a la salida del huerto, hbíaa quedado muy cercana a la puerta de entrada, y el camión de mantenimiento del huerto chocaba para salir. Por otro lado, se detectó mala evacuación del agua en varios vados peatonales, donde se acumula el agua. Y en la parte sur de la calle se produjeron roturas en los materiales de las fachadas de los edificios existentes. Ni se acabaron las unidades de obra pendientes ni se repararon la mayoría.
Así, el 25 junio se acordó rescindir, por lo que según la legislación contractual debió estar resuelto el expediente el 25 de septiembre, cosa que la Junta de Gobierno declaró en una Junta de Gobierno del 12 de noviembre. La suspensión se adoptó habiendo transcurrido con creces el plazo de tres meses para resolver el procedimiento, con lo que ya había caducado el procedimiento de resolución del contrato, con arreglo a la Ley.