ELCHE. Estos días pasados el Ayuntamiento, desde el alcalde a varios concejales, han manifestado su contrariedad con la formulación de la legislación del palmeral, al entender que la interpretación que se hace de la misma impide el desarrollo urbanístico del municipio. Al menos, a tenor de la parálisis en la que han estado varios sectores urbanísticos o licencias de obra que hasta ahora no se habían aprobado al no haberse constituido los órganos nuevos, la Junta Rectora o el Patronato. Por lo mencionado, uno de los puntos que muestran esa inquietud es la zona de amortiguamiento, o área buffer del bien, es decir, el perímetro circundante de los huertos históricos, a los que la Ley también considera Bien de Interés Cultural (BIC) y que hay que preservar por el valor del paisaje.
Aunque el propio Pablo Ruz o el edil de Palmeral, Juan de Dios Navarro, no han acabado de concretar cómo se traduciría esa reforma, porque es una cuestión técnica sobre la que "hay diferentes interpretaciones según técnicos de conselleria o Ayuntamiento", matizaba el vicealcalde Francisco Soler, también responsable de Urbanismo, esa zona de amortiguamiento parece uno de los puntos que señalan. Según lo planteado por Navarro, más que por la reforma de la Ley del Palmeral, que tendría que venir por el nivel autonómico, sería por el Plan Especial de protección del palmeral, que ahora se tiene que volver a presentar tras caducar su permiso ambiental.
Tras estas declaraciones, desde Volem Palmerar ven "muy preocupantes" las declaraciones del regidor, "en las que expresa que le parece bien no construir dentro de los huertos, pero que no poder hacerlo junto a ellos iría en contra del desarrollo de la ciudad", indican desde el colectivo. "No por esperado deja de sorprendernos que se trate de obviar no sólo el dictamen de la ley, sino los compromisos con Unesco, pues se fijaron en ellos unas zonas de protección alrededor de los huertos (zona de amortiguamiento o buffer) que luego se plasmaron en la ley del Palmeral", incide el colectivo conservacionista.
Y añaden que "podrán modificar la ley en les Corts Valencianes, pero es su deber seguir respetando la ley vigente y no olvidar lo que se firmó para obtener el tan cacareado Patrimonio de la Humanidad, a riesgo de perderlo". Si bien por ahora no se ha concretado más sobre una posible modificación que quizá iría más directa a ese plan local, necesario para aterrizar y desplegar la ley autonómica. A la que por otra parte, el PP y Vox se abstuvieron, precisamente por considerar que era demasiado restrictiva. El colectivo defiende que su objetivo es velar por ese cumplimiento de la Ley, "pues respetar el palmeral no es solo no destruir más huertos, sino también respetar su visibilidad y su entorno". El colectivo recuerda que la legislación aprobada hace mención explícita a la protección de esa zona de amortiguamiento en el Artículo 1, y en el 3, con la categoría de "espacio etnológico".
Sea como fuere, habrá que esperar a que se conozcan más detalles. Mientras que el alcalde ya ha manifestado su contrariedad con esos puntos que podrían constreñir el urbanismo, también se mostraba favorable al uso tradicional e incluso agrícola de los huertos. Aunque eso sí, aún no se ha planteado ninguna actuación para con estos. Cultura, por ahora, y como otros departamentos, ya está advirtiendo de la deuda autonómica. Por ahora se han quedado en los 200.000 euros que ya se presupuestaron para este año.
