ELCHE. La ciudad ya tiene aprobada la nueva ordenanza de terrazas tras la sentencia del Tribunal Supremo (TS) por la que debía dejar un itinerario suficiente para viandantes con discapacidad visual. Una ordenanza que limitará a las terrazas de Elche a ocupar la mitad de calles peatonales y plazas y con la que el equipo de gobierno asevera que calles como Hospital o Troneta, donde más conflicto puede haber por la densidad de terrazas, quedarán prácticamente igual, como señala el portavoz Héctor Díez. A pesar de las distancias a las que les obliga el TS, el bipartito se ha guardado un as en la manga: en la nueva redacción contempla que los servicios técnicos se reservarán el derecho de encajar las terrazas en el caso de que haya conflicto.
En otras palabras, se han cubierto las espaldas para estudiar caso a caso aquellas en las que puede haber problemas. Ese comodín técnico tendrá que amoldar la directriz del TS teniendo en cuenta los intereses comerciales y el tránsito de los peatones. En cualquier caso, la mitad de la acera tiene que quedar libre, calculando este espacio entre el mobiliario de la terraza y la fachada y siempre tendrá que haber al menos un itinerario peatonal no inferior a 1,80 metros. Precisamente porque lo que prohíbe la sentencia es que se signa con las terrazas adosadas a la fachada del inmueble. Pero con la supervisión técnica, se verá cómo se adecua esta situación a vías en las que hay terrazas a ambos lados o en las que no hay una homogeneidad.
La ordenanza establece que en las calles peatonales o de acceso rodado restringido se estará, en cuanto a su ubicación, a lo dispuesto por el Servicio Técnico según las circunstancias concretas de cada uno de los espacios públicos, no pudiendo ser superior la ocupación total del 50% de su superficie. De nuevo, en las aceras, la ordenanza plantea que el itinerario peatonal libre podrá ser ampliado, previo informe de los servicios técnicos municipales, cuando lo requiera la intensidad del tránsito de viandantes.
Con esto, calles como Troneta o Hospital quedarían igual por esa distancia entre terraza y fachada. En el caso de las aceras en vías no peatonales, se dejará la terraza siempre en un lado únicamente, aunque se contempla que sea algo general. Serán los técnicos los que tengan que dirimir. Ahora se abre un plazo de alegaciones para su ulterior aprobación en el pleno. Eso sí, esta ordenanza puede significar que algunas terrazas pierdan mesas.