ELCHE. El Ayuntamiento ya ha adjudicado las obras para el acondicionamiento de un sistema de pluviales en la carretera de Santa Pola, en el famoso tramo del establecimiento Venta Durá, que suele ser uno de los puntos de mayor inundación cuando hay riadas por aguas torrenciales. El objetivo es que las primeras aguas de escorrentía continúen por el camino viejo de Elche - Santa Pola, y construir allí una captación y conducción que derive caudales al Segundo Canal de Desviación. La adjudicataria ha sido Construcciones Hermanos Espín, por un montante de 119.255 euros. Afectará a 630 metros donde está el problema.
La licitación ha durado tres meses con un procedimiento abreviado, y el plazo de obras ahora es de seis semanas. "Para que esté listo de cara a los periodos de posible gota fría", explica el concejal de Contratación, Claudio Guilabert. Asimismo, la firma ha renunciado a solicitar un incremento del precio de la obra en el caso de que hubiera que trabajar en festivos, hacer horas extra o que de nuevo hubiera incremento de los precios. Con el sistema previsto, se va a ampliar la capacidad de la infraestructura existente, ya que lo que hasta ahora permitía era que el agua fuera hacia la carretera. Ahora se reconducirá para que se vierta en el canal de desviación que hay cerca para intentar reutilizar el agua.
La Junta de Gobierno aprobará este jueves la adjudicación, si bien desde el Ayuntamiento son conscientes que esto es solo una solución provisional y a corto plazo. La solución de fondo, o la que quiere el Consistorio, quiere un tanque de tormenta que pueda drenar el vertido en la zona del barranco de San Antón —donde va a parar el agua tras la construcción de la Ronda Sur—, y que se pudiera implementar cerca del barranco, junto a la Ronda Sur, donde ya hay tres colectores. Aunque habría que implicar a la Confederación del Segura, Aigües d'Elx. Quieren empezar los trámites durante esta legislatura.
