MADRID (EP). La cartera del Eurosistema y del Banco Central Europeo (BCE) se están descarbonizando de manera "sostenida", al migrar sus inversiones hacia activos menos contaminantes, según ha informado este martes el instituto emisor paneuropeo.
"Las emisiones de carbono asociadas a las carteras del sector empresarial del Eurosistema han seguido disminuyendo. La mayor parte de esta reducción se debió a que los emisores de los instrumentos se volvieron más eficientes en materia de carbono", ha explicado el BCE en un documento recogido por Europa Press.
"Aproximadamente una quinta parte de la reducción total de las emisiones en 2022 y 2023 se debió a sus esfuerzos por orientar las reinversiones hacia emisores con mejores resultados climáticos", ha elaborado.
El BCE ha recordado que la segunda edición de este informe financiero proporciona información sobre la huella de carbono de su cartera y su exposición a riesgos climáticos, así como a criterios de buena gobernanza climática, estrategias de gestión y de contención de riesgos.
Además, el Consejo de Gobierno de la institución que preside Christine Lagarde ha acordado la fijación de objetivos provisionales de reducción de emisiones para las carteras del sector empresarial en el programa de compras de activos (APP) y en el programa de compras de emergencia frente a la pandemia (PEPP).
En esta fase, los objetivos provisionales se utilizarán internamente para supervisar la trayectoria de reducción de emisiones de las carteras del sector corporativo. No obstante, el BCE ha advertido de que, de detectarse desviaciones respecto a la senda deseada, se evaluarán "medidas correctoras" dentro del mandato del Consejo de Gobierno, aunque siempre caso por caso.
El alcance del análisis de la información sobre los activos mantenidos con fines de política monetaria se ha ampliado "considerablemente" para incluir también las tenencias del Eurosistema de activos del sector público y de bonos garantizados en el marco del APP y del PEPP, así como las reservas exteriores del BCE.
Así, se han supervisado el 99,7% del total de activos en el marco del APP y el PEPP, mientras que el año pasado la información recabada se centraba exclusivamente en los activos del sector empresarial. Solo se han obviado las tenencias de bonos de titulización de activos (ABS), para los que no se dispone de datos suficientes.
La información sobre las carteras no monetarias del BCE incluyen las inversiones del fondo de pensiones de sus empleados y fondos propios del BCE. Estas siguen ahora los parámetros de referencia de la UE coforme a lo delineado en el Acuerdo de París, lo que ha conducido a una caída en las emisiones asociadas de cerca de un 50% en 2023 en comparación con el año anterior.
Tras la introducción de estos criterios, el BCE se ha propuesto reducir "aún más" la huella de carbono de estas inversiones en una media anual de, al menos, un 7% de cara al futuro.
La proporción de bonos verdes en la cartera de fondos propios del BCE aumentó del 13% en 2022 al 20% en 2023, y, ahora, proporciona más de 4.500 millones de euros en financiación para la transición verde. El BCE tiene previsto aumentar este porcentaje al 25% en 2024.