ALICANTE. La tercera modificación de crédito del presupuesto de 2018 impulsada por el Gobierno del Ayuntamiento de Alicante, del PP, vuelve a reabrir el debate político sobre las prioridades de la ciudad. Los dos principales grupos de la oposición, PSOE y Guanyar, preparan el registro de sus alegaciones a esa cambio en la contabilidad municipal, aprobado de manera inicial en el pleno del pasado 15 de octubre, por un importe global de 12 millones que se destinarán a la ejecución de obras municipales. El plazo para formular esas alegaciones expira el 8 de noviembre. Y lo cierto es que cada formación tratará de forzar al PP (que gobierna en situación de minoría, con 8 concejales en una corporación de 29 ediles) a aceptar su propio camino a la hora de planificar esas inversiones.
El PSOE, que se abstuvo en el debate de la propuesta junto a los ediles de Ciudadanos (Cs) y Compromís, mantendrá la posición reivindicativa que su portavoz expuso en su intervención ante el pleno. Así, reclamará que se lleven a cabo actuaciones prioritarias en todos los barrios, a partir de los proyectos redactados fundamentalmente desde la Concejalía de Urbanismo. En esta línea, también incidirá en la necesidad de que se lleve a cabo el proyecto de reordenación de la franja litoral para configurar un paseo peatonal con trazado continuo desde los términos municipales de El Campello hasta Elche. Se trata de una de las propuestas más reivindicadas por los sectores empresariales vinculados al sector turístico como posible elemento diferencial de la oferta de la ciudad.
En realidad, al menos un primer tramo de ese corredor litoral sí está contemplado en la modificación de crédito aprobada por el PP: el que afecta al llamado tramo del Promontorio, que se pretende financiar con cargo al préstamo de 8 millones que se acaba de licitar para que las entidades de crédito puedan presentar ofertas en un plazo de 15 días naturales. El acuerdo que activa su contratación se aprobó este martes en Junta de Gobierno sin que el cambio contable que lo ampara esté aprobado de forma definitiva (algo que no sucederá, precisamente, hasta que no se estimen o rechacen las alegaciones que se presenten).
Por su parte, el grupo municipal de Guanyar, que apoyó al PP para que prosperase la modificación presupuestaria junto a los ediles no adscritos (Fernando Sepulcre y Nerea Belmonte), elevará una propuesta para que se amplíe el importe de ese préstamo bancario con el propósito de que se dé cobertura a otras obras ahora no contempladas y que resultan tan o más necesarias como las que sí incluye en el acuerdo del PP: entre las previstas, figura la Plaza de la Ciudad de la Justicia, la segunda fase de la reordenación de La Explanada o la recuperación arquitectónica del Castillo de San Fernando, entre otras.
La plataforma electoral que lidera EU no ha desvelado todavía el importe de la financiación que, a su juicio, debería solicitarse a los bancos, ni el detalle de esas obras adicionales. Por el momento, sólo se concreta que todas están reflejadas en el llamado documento número 25, incorporado como anexo al presupuesto municipal que se aprobó bajo el mandato del PSOE en solitario, el pasado marzo. El portavoz municipal de Guanyar, Miguel Ángel Pavón, señaló, al respecto, que todos esos nuevos proyectos ahora excluidos están listos para que se inicie su proceso de contratación. Pero no sólo eso. Guanyar también reclamará que se suplementen otras partidas como las previstas para cooperación internacional o la de ayudas sociales, entre otras. Según Pavón, podrían dotarse de fondos adicionales a partir de los ahorros que se generen en otras contrataciones.
El grupo municipal de Cs no prevé presentar su propio paquete de alegaciones. En cualquier caso, su portavoz, Yaneth Giraldo, sí manifestó su "recelo", este miércoles, por "las prisas que tiene el PP en endeudar al Ayuntamiento con 8 millones de euros, como se ha visto en Junta de Gobierno, cuando esta operación está en fase de aprobación inicial y tiene que ser ratificada aún por el pleno". "Con las prisas que lleva el equipo de Gobierno, se han olvidado de otras prioridades que iban en la modificación de créditos como son las inversiones sostenibles o el presupuesto para las juntas de distrito, asuntos que sí que parece que tendrán que esperar hasta la aprobación definitiva", indicó.
"Parece que Barcala sigue los pasos de Compromís en el Ayuntamiento de Valencia donde Joan Ribó acaba de anunciar un crédito de 18 millones de euros justo cuando dicho Consistorio acaba de salir también de un plan de ajuste". Giraldó recordó que Cs se abstuvo en la votación sobre el cambio presupuetario y la concertación de un crédito al considerar que "no es el momento de endeudar al Ayuntamiento ya que no se saben como van a quedar las cuentas de 2019, cuando entre en vigor la bajada de los impuestos que se aprobó en un reciente pleno".
El grupo municipal de Compromís, por último, no prevé presentar objeciones a la vista de que las propuestas que ya trasladó al edil de Hacienda, Carlos Castillo, para que se desarrollasen actuaciones como la reforma del matadero como centro para startups, por ejemplo, no se tuvieron en cuenta en el acuerdo inicial.
El registro de alegaciones expone al equipo de Gobierno a tener que renegociar apoyos para su admisión o rechazo. Para que la tercera modificación de créditos quede aprobada de forma definitiva, debe volver a reunir más votos a favor que en contra. Ese requisito puede conllevar la necesidad de incorporar añadidos a propuesta de otros grupos políticos.