ALICANTE. El PSPV-PSOE no baja los brazos. Todo lo contrario: dará la batalla "hasta el último minuto" para gobernar en el Ayuntamiento de Alicante y en la Diputación. Y queda bastante tiempo por delante para conseguirlo. Esa fue la reflexión y la línea estratégica que se trazó este viernes en la reunión de la Comisión Ejecutiva Nacional del partido, celebrada en València, respecto a los escenarios abiertos en las dos principales instituciones de la provincia.
Fuentes consultadas por Alicante Plaza precisaron que hubo al menos cuatro intervenciones cruciales en esa dirección: las del propio secretario general del PSPV, Ximo Puig; la de su número 2, Manuel Mata; la del secretario del área de Preparación del Futuro, Francesc Colomer; y la del responsable de la secretaría de Política Comarcal, Toni Francés. Así, la ejecutiva emplazó a "abrir todos los canales de comunicación" que resulten necesarios para la consecución de ambos objetivos.
¿Con qué base? Primero, la de impedir que el PP acabe incorporando a los ediles de Vox para alcanzar acuerdos por mayoría en las votaciones que puedan plantearse en el Ayuntamiento de Alicante a lo largo del mandato que arranca el próximo 15 de junio. Y segundo, que se cumpla la voluntad trasladada por la ciudadanía a través de las urnas en el conjunto de la provincia, donde el PSPV ha sido la fuerza más votada, aunque empatada a 14 diputados con el PP. La meta es que se produzca "una regeneración democrática en la Diputación", tras 24 años de dominio de los populares.
En esta línea, se incidió en la necesidad de atajar el bloqueo desplegado por los populares en estos últimos cuatro años desde la institución provincial, "en los que se han dedicado a obstaculizar que las políticas de progreso puestas en marcha desde la Generalitat lleguen a Alicante", según las mismas fuentes.
Para que alcanzar ambos objetivos, el PSPV-PSOE debe contar necesariamente con la anuencia o la implicación de Ciudadanos (Cs). En especial, por lo que respecta a la gobernabilidad de la ciudad de Alicante. El reparto de fuerzas que deparó el escrutinio de las municipales ya es de sobra conocido: el PP y el PSPV empataron a 9 concejales y Cs obtuvo 5; mientras que Unides Podem EU, Compromís y Vox, lograron dos actas cada uno. La clave está en que, si no se alcanza una mayoría de 15 concejales entre 29 posibles, el PP -con Luis Barcala al frente- retendrá la Alcaldía, ya que la suya fue la candidatura más votada.
En esta línea, según las fuentes consultadas, se incidió en la línea que viene expresando el propio Puig desde el día siguiente de las elecciones: oferta de máxima generosidad hacia Cs en lo que se ha interpretado como la posibilidad de que sea su candidata, Mari Carmen Sánchez, quien asuma la Alcaldía.
En lo que concierne a la Diputación, al PSPV-PSOE le bastaría con la abstención de los dos representantes de Cs para que el presidente de la institución pudiese ser socialista. El único freno a ese horizonte sería un hipotético acuerdo entre PP y el partido de Albert Rivera, ya que, juntos, suman 16 diputados de 31 posibles.
Lo cierto es que, hasta el momento, no ha trascendido ninguna cita formal ni oficial entre representantes de PSPV-PSOE y Cs para explorar posibilidades de acuerdo, más allá de ese ofrecimiento público inicial formulada por el propio Puig. Por el contrario, sí ha habido al menos un encuentro entre el portavoz de Cs en les Corts, Toni Cantó, y la presidenta del PPCV, Isabel Bonig. Eso sí, como publicó este diario, fue una primera toma de contacto (el encuentro duró 30 minutos) en la que no se cerró ni se descartó ningún pacto.
En realidad, como ha contado este diario, el primer contacto oficial entre PP y Cs en el que se hablará de posibilidades de acuerdo para el Ayuntamiento y la Diputación, se celebrará este próximo lunes, 10 de junio. La cita está señalada para las 17:00 horas con la participación de Barcala (alcalde en funciones y cabeza de lista del PP); del presidente provincial del PP, José Císcar; y del número 2 de la lista del PP en Alicante y aspirante a presidir la Diputación, Carlos Mazón. Por parte de Cs, se prevé la asistencia de Cantó y de Sánchez. Ambos son miembros del comité regional de pactos que debe elevar informe al comité de pactos nacional, en Madrid.
Hasta el momento, no existe ningún preacuerdo ni alianza concertada entre los dos partidos, al margen de la directriz general marcada desde la cúpula nacional de Cs: que el PP sería el socio preferente, y que solo se descartaría toda negociación con nacionalistas y populistas. Por no haber, hasta el mediodía de este viernes no había ni alianza entre PP y Cs para la Alcaldía de Madrid. Por la tarde, sí se alcanzó un preacuerdo sobre el gobierno autonómico madrileño entre ambos partidos.