ELCHE. El equipo de gobierno quiere captar 4,4 millones de euros de los fondos Next Generation para regenerar agua en el Palmeral y rehabilitar el Molí del Real, que pasaría a ser un centro interpretativo del agua, además de una centralita desde la que controlar todo lo que afecta a la calidad del agua, vertidos, temperatura... Un plan que supondría dejar de utilizar agua potable para el riego de los huertos alrededor de la ladera del río. Actualmente solo los huertos del Tio Masot y Contador son los que se riegan con agua regenerada, desde la pasada legislatura.
Se trata aún de un anteproyecto, aún sin finalizar, que busca la renaturalización y revegetación de las zonas contiguas alrededor del río, actuando sobre 9.100 metros lineales de infraestructura hidráulica, y movilizando al año 2 hectómetros cúbicos de la depuradora de Algorós para riego del Parque Municipal, el Parque de Tráfico o el Valle Trenzado, entre otros, así como el futuro jardín en homenaje a las víctimas de la covid en el entorno del Cementerio Viejo o el futuro Hort de Rastoll, actuación que se vincula con esta a través de los fondos Edusi y la estrategia de Capital Verde 2030.
Así, la iniciativa tiene cuatro objetivos: mejorar la calidad del agua, sustituir el agua de riego potable por la regenerada, ampliar los huertos del cauce con este sistema y renaturalizar la masa vegetal de las laderas y el Valle Trenzado, eliminando las especies invasoras. Se actuaría sobre esos 9.100 metros de conducción y 45 acometidas de agua. Una propuesta que destacan desde el equipo de gobierno por el vínculo con la sostenibilidad y el patrimonio, al rehabilitar de forma integral el Molí del Real. "Queremos pasar de una ciudad gris a una ciudad verde", decía la edil de Medio Ambiente Esther Díez, quien añadía que generar esta función ambiental del palmeral "es también una forma de asegurar su viabilidad".
Asimismo, en el caso de que el Ayuntamiento no logre que el Gobierno adscriba fondos europeos a esta actuación, se quiere implementar igualmente en el futuro, aunque con otras fases y tiempos más laxos. En el caso de que el Ejecutivo dé luz verde, la obra para finalizar toda la intervención tardaría entre 16 y 20 meses.
