Delante, con mascarilla negra, Óscar Lillo (PP). Al fondo, el alcalde, Jesús VillarSAN VICENTE DEL RASPEIG. El Partido Popular pone de manifiesto las llamadas de auxilio de los trabajadores del CIVIC y más recientemente del departamento de Servicios Sociales, a las que ahora se suman las llamadas de ayuda del departamento de Recursos Humanos. Solicitan la voluntad de compañeros de otras áreas para poder afrontar un trabajo de gestión inmediata, para el que no dan abasto con el personal actual.
"Este nuevo S.O.S de un departamento municipal es ya un síntoma de la gravedad de la situación, que, por otra parte, se está convirtiendo en algo cotidiano en el Ayuntamiento de San Vicente. Era ya preocupante que dos departamentos de atención directa al ciudadano se hubieran hartado de la situación y pidieran auxilio, incluso a través de los medios de comunicación, como se hizo recientemente desde Servicios Sociales, circunstancia que ha llevado al Síndic de Greuges a actuar de oficio y pedir informes sobre la caótica situación”, manifiesta Óscar Lillo, portavoz de los populares de San Vicente. “Pero más alarmante resulta que el quien lo pide ahora es principal pilar y motor del consistorio, el departamento de Recursos Humanos”.
El PP ha tenido conocimiento de la solicitud, que desde la Coordinación de la Jefatura de Recursos Humanos del Ayuntamiento de San Vicente se ha enviado al resto de trabajadores municipales del Ayuntamiento, solicitando la voluntariedad de compañeros auxiliares administrativos de otras áreas, para trasladarse a Recursos Humanos y así poder hacer frente a la acumulación de trabajo paralizado en estos momentos debido a la falta de personal y que requieren una gestión inmediata. “Es inaudito que los departamentos tengan que autogestionarse y reclamar ayuda para poder sacar adelante su trabajo, como consecuencia de la ineficacia del alcalde y concejal de RRHH y Urbanismo, Jesús Villar (PSOE), y su equipo de gobierno”.
“La situación solo tiene una lectura y, por desgracia para nuestra localidad, es el estandarte de este equipo de gobierno: la falta de previsión y planificación. Son seis los concejales de Recursos Humanos que han pasado por este departamento desde que Villar ostenta la Alcaldía y, finalmente, lo tuvo que asumir él mismo, no sabemos si fruto de la falta de capacitación de sus compañeros de gobierno o de la desconfianza hacia ellos para delegar esta competencia en algún otro”, señala Lillo. “A su vez, lo que deja bien clara es la inoperancia del alcalde en el mismo, motivando este tipo de situaciones que paralizan el funcionamiento del Ayuntamiento. Dentro de esta sinrazón lo más lógico sería que dejara esta concejalía, por lo que lo coherente es exigir que dimita como responsable de Recursos Humanos y busque en quién delegar este departamento, si él no es capaz de llevarlo adelante como demuestra esta reclamación del propio departamento, ante la que desconocemos si el alcalde y concejal de Recursos Humano está de acuerdo o si ha tenido conocimiento previo de su envío”.
“La excusa favorita de este equipo de Gobierno, que es la falta de personal, no es válida, puesto que el responsable de que exista esta carencia es del propio equipo de gobierno (PSOE-EU-Podemos), que tiene pendiente de convocar plazas desde 2017 y ni tan siquiera ha sido capaz de cubrir las de los trabajadores que se han jubilado a lo largo de este período”, apunta el portavoz popular. “Villar cogió un Ayuntamiento en 2015 en pleno funcionamiento y con unos trabajadores que llevaban demostrando que pueden y saben desarrollar su trabajo desde hacía años. Trabajadores que ahora piden auxilio ante el caos en que han sumido al Ayuntamiento y en muchos casos deciden optar a otras administraciones, no en busca ya de mejoras económicas, sino donde les permitan desarrollar su trabajo en unas condiciones adecuadas”.
