ORIHUELA. Reuniones y conversaciones van y vienen a la hora de perfilar el que va a ser el gobierno local para Orihuela. Hasta hace unos días parecía que la vía estaba más cercana a un entendimiento dirigido a un pacto entre PP y Ciudadanos. No obstante, según fuentes consultadas por Alicante Plaza, los populares oriolanos pondrá en marcha la Junta Local sin esperar a Ciudadanos. Las exigencias en las Concejalías que piden desde la formación naranja, siempre según las misma fuentes, habría hecho que la balanza en el lado del PP oriolano sea más proclive a repartir las áreas del gobierno local entre sus nueve ediles. Al parecer, como previsible, Ciudadanos ha reclamado áreas de peso de cara a un futuro pacto con el PP, y no solo eso, sino también más responsabilidades y espacios que los que han dirigido sus tres ediles desde 2017 a 2019, en el anterior mandato. Al parecer, las peticiones o las exigencias de la formación naranja no han complacido al PP, que ya plantea comenzar en solitario.
En principio, en las reuniones, no solo se estaría planteando el reparto de Concejalías, sino la organización de estas áreas. Ciudadanos apostó, durante la campaña e incluso antes, en reducir el número de Concejalías para adaptarlas a grandes áreas de trabajo, unas cinco, con varias personas al cargo, que englobasen todas las necesidades para el funcionamiento local. Una forma para tratar de coordinar los trabajos y que las áreas estén más concentradas y no se realice trabajos paralelos o "compartimentos estancos" en cada Concejalía donde se produzca un comunicación menos fluida. Sin embargo, esta es la visión de funcionamiento desde Cs que planteaban en campaña y no tiene por qué coincidir con la del PP, o incluso hayan podido dejar atrás esta visión de departamentos para primar otras negociaciones.
Asimismo, cabría la posibilidad de que Ciudadanos se pudiera unir en un futuro al equipo de gobierno, si de entrada PP cierra filas a sus ediles. En algún momento dado, quizá en un mes, quizá más adelante, Ciudadanos tendrían que jugar la carta de los pactos para entrar a apoyar un gobierno local que, con una minoría de nueve ediles es difícil que funcione de manera fluida.
En la toma de posesión de Emilio Bascuñana como alcalde, el pasado sábado, el popular durante su discurso, ya abrió la puerta a negociar con Ciudadanos posibles pactos, o bien de gobierno, o bien de apoyo. También manifestó, al igual que otros ediles recién designados, que querían dejar unos días de margen para entablar relaciones. Ciudadanos se desmarcaba entonces de entrar directamente en el gobierno local, pero en todo momento dejó clara su disposición de "puertas abiertas". Bascuñana resultó elegido al ser la lista más votada y no haber un candidato o candidata alternativa que haya conseguido la mayoría. Quizá este movimiento de formar gobierno en solitario sea solo parte de las negociaciones o un movimiento decidido del PP del que cabrá estar pendientes en los próximos días.