ELCHE. Popeyes, una de las mayores cadenas de restauración organizada especializada en pollo, continúa su expansión por el territorio con la apertura de su primer restaurante en Elche, el cuarto en toda la provincia de Alicante. El restaurante, situado en el Centro Comercial Aljub, es el local número 13 de la marca en toda la Comunidad Valenciana. Se inauguró este miércoles 7 de junio.
Con la apertura, Popeyes amplía su presencia la comunidad, en la que indican que llevan invertidos unos 20 millones de euros, de los cuales "1,5 millones serán para el restaurante en Elche. Así, la cadena creará un total de 30 nuevos puestos de trabajo en el municipio, que se sumarán a los cerca de 400 que genera en toda la Comunidad Valenciana".
La compañía aterrizó en España a finales de 2019, inaugurando más de 90 establecimientos a lo largo de toda la geografía.
"Continuamos reforzando nuestro compromiso en la Comunidad Valenciana, en la que hemos sido acogidos con los brazos abiertos desde el primer día. Estamos ilusionados con la apertura de nuestro primer restaurante en Elche, ciudad conocida por su riqueza cultural y gastronómica y con compartir nuestro pollo con el auténtico sabor de Louisiana con todos los ilicitanos", explica Yvette Altet, directora de marketing del grupo en España y Portugal.
El restaurante contará con zona de refill de bebidas, Wifi, servicio take away, sistema de autopedido, zona infantil y servicio a domicilio a través de su plataforma de reparto propia, que estará disponible próximamente. También una plataforma de reparto propia "que es clave para la marca de cara a garantizar la máxima calidad del producto y mantener el control de todo el proceso desde la elaboración hasta la entrega". Es la propia empresa la responsable del reparto de todos los pedidos que se realizan, ya sea a través de la app propia o de las de los distintos agregadores con los que trabaja.
Su apuesta se inspira en sus raíces, con sabores típicos de Louisiana, donde se cocina respetando la riqueza y mezcla de sabores herencia de su historia multicultural. "Engloba desde las materias primas a la elección de proveedores y por supuesto, al proceso de elaboración y la trazabilidad de toda la cadena de suministro. De este modo, la compañía apuesta por un nuevo concepto de comida rápida y cocinado lento, basado en un producto fresco y de origen 100% nacional que proviene de granjas ubicadas en Castilla y León, Navarra y Cataluña", señalan.
El pollo Popeyes es fresco, 100% español, y se marina durante 12 horas en una mezcla de especias cajún. "Se realiza un rebozado diario a mano en cada restaurante para mantener los estándares más altos de calidad y ofrecer el mejor producto al consumidor: crujiente por fuera y jugoso por dentro", indican desde la empresa. Desde que desembarcaron en España han adaptado su oferta a los gustos del país, ofreciendo su clásico pollo crujiente (en piezas o tiras crujientes de solomillo de pollo), diversas opciones de hamburguesas de pollo rebozado (Original Crunchy Chicken Sandwich) y pollo a la parrilla (The Grilled NOLA), además de sus nuggets y similares.
