ELCHE. El último pleno del año ha aprobado inicialmente la nueva ordenanza de eficiencia energética y acsesibilidad, que permitirá la instalación de ascensores en los exteriores de los inmuebles, ocupando la vía pública. Aprobada adrede para poder llevar a cabo el proyecto de rehabilitación de los bloques de Porfirio Pascual. Supondrá la renovación de 18 bloques y más de 300 viviendas, en las que viven 774 habitantes. Ahora la ordenanza tendrá de nuevo otra exposición pública antes de su aprobación definitiva.
Una medida que desde Vox el edil Juan Antonio Alberdi se ha criticado porque "se tenía que haber hecho antes, como han hecho en Santa Pola, donde se permiten los retranqueos con escaleras y ascensores". El concejal planteaba que quizá es más económico recurrir a expropiaciones en el interior de los inmuebles para habilitar en los huecos los ascensores. En cualquier caso cree que algunos puntos pueden traer problemas y que "hay que estudiar detenidamente otros casos", poniendo de relieve que serán los titulares, es decir los vecinos, quienes asuman el mantenimiento al ser los propietarios del mismo. La responsable de Urbanismo Ana Arabid indicaba que es necesaria y hay que "avanzar", aunque las dudas se podrían haber planteado en la comisión de urbanismo, planteaba.
Todos los partidos han votado a favor salvo el PP, que se ha abstenido porque cree que según se interprete, genera dudas. Plantean que las pérgolas fotovoltaicas, no limiten el uso y no computen como aumento de edificabilidad. Lo abordarán ahora en las alegaciones a la consulta pública.
Por otra parte, la plataforma de Contratación del Estado ya ha publicado la licitación de la asistencia técnica y dirección del proyecto de rehabilitación del barrio de Porfirio Pascual y establece un plazo de presentación de ofertas que concluye el día 4 de enero del próximo año de 2023.
Esta publicación “supone un paso necesario y un avance importante para poder tener redactados y aprobados los proyectos de rehabilitación del barrio en el primer semestre de 2023, como anuncié durante la reciente reunión con los vecinos en compañía del vicepresidente del Consell y conseller de Vivienda, Héctor Illueca, y el secretario autonómico de Vivienda, Alejandro Aguilar”, ha destacado el alcalde ilicitano, Carlos González.
La actuación contempla cuatro aspectos clave, la rehabilitación estructural, la accesibilidad, la eficiencia energética y la reurbanización del entorno. La intervención tiene un coste de algo más de 13 millones de euros y cuenta con unos 10 millones aportados por fondos europeos Next Generation, en torno a dos millones del Ayuntamiento y un millón que correrá a cargo de los vecinos que se benefician del proyecto, aunque, como precisa el alcalde, “las personas que se encuentren en situación de vulnerabilidad social acreditada estarán exentas del pago de las cuantías que correspondan”.