ELCHE. Mientras que el equipo de gobierno sigue sin arrancar el concurso público de ideas para el entorno del Mercado Central y el propio inmueble, las noticias empiezan a llegar por el contencioso de Aparcisa contra la rescisión, así como del propio mercado provisional. En este sentido, el Ayuntamiento notificaba a principios de mes a los placeros si querían personarse como terceros implicados en todo el proceso judicial, cosa que rechazan. Al tiempo, el colectivo ve con buenos ojos la propuesta que les ha puesto el Ejecutivo local encima de la mesa: hacer de la Avinguda de la Comunitat Valenciana un bulevar, un nuevo aparcamiento y rediseñar el actual mercado provisional para darle una imagen más atractiva.
En este sentido, este pasado miércoles el alcalde Carlos González se reunía con el colectivo de placeros para informarles de la situación actual de todo el caso, una vez llega la vía judicial tras la rescisión del contrato. Lo que también compete al futuro del mercado provisional que por otra parte ya no es provisional dado que el bipartito va a consolidarlo en dicha zona verde. En la reunión el primer edil presentó a los placeros la propuesta de lo que piensan hacer en sus actuales instalaciones.
Ello pasa primeramente por construir un aparcamiento desde el Corazón de Jesús hasta la confluencia con la avenida, que quedaría habilitado para el uso y servicios del mercado de abastos. En definitiva, una propuesta acorde a lo que ya se les había planteado en distintas ocasiones sobre la cesión del aparcamiento de Josep María Buck y que había sido rechazado varias veces estos años. El segundo punto es el de actuar de forma integral en la avenida para darle otra cara y crear un bulevar. Y el tercer eje sería el de rehabilitar el actual mercado en activo para una reforma definitiva que rompa con la estética básica y únicamente funcional del inmueble. El equipo de gobierno ha quedado en entregarles un proyecto de diseño en uno o dos meses para que los placeros puedan visualizarlo y participar de la propuesta.
Desde la asociación Nou Mercat d'Elx están receptivos con la propuesta planteada. Como indica la portavoz del colectivo Maricel Trotta, "a nosotros nos ha interesado la propuesta para empezar a trabajar, queremos una solución y algo que ya sea definitivo". La condición con este pack de actuaciones es que haya feedback con ellos, hastiados por otra parte de luchar con lo que ahora ya es evidente: no se ejecutará el proyecto de Aparcisa, un desgaste al que han estado sometidos años y que entra ahora en otra fase clave, la judicial. Trotta reconoce, como ha sido fehaciente durante estos años, que "antes había tiranteces porque estábamos con Aparcisa y habíamos pagado algo que no veíamos", señala, y precisa que al haber asumido el Ayuntamiento la gestión y que tan solo son ahora las dos partes, "si llegamos a una conclusión con un pliego de condiciones y proyecto que nos gusta, vamos para adelante". Ven positivo que sea una propuesta trabajada entre ambas partes "y no una imposición". Esta fue una primera toma de contacto con la nueva Junta Directiva y ahora quedan a la espera de la visualización del hipotético nuevo proyecto.
Por otra parte, en cuanto a la notificación por si consideraban oportuno personarse en el procedimiento judicial, no lo harán ni con unos ni con otros. "A nosotros no nos ha perjudicado la rescisión porque el Ayuntamiento ha absorbido la gestión", explica la portavoz de los placeros, quien incide en que tan solo quieren trabajar y tener asegurado un futuro puesto. En este caso, aunque dieron un aval a modo de 'señal' para reservar los emplazamientos en el proyecto de la mercantil gallega, se comunicaron con Aparcisa y esta les trasladó que devolverá ese dinero al Consistorio, ahora que es el actual gestor del mercado. Por tanto, en la práctica ese aval que pagaron, y por el que incluso alguno de los placeros tuvo que pedir un préstamo, ha cambiado de manos. Aún no han entrado al detalle con qué pasará con este dinero, pero se verá más adelante. Por lo pronto, con la asunción municipal a través de Pimesa tienen garantía de que seguirán trabajando con normalidad en sus puestos.
Ahora queda por delante una actuación urbanística importante, tanto en la calle de las instalaciones, donde se ha prometido una reforma para darle más dinamismo, como para ese nuevo aparcamiento en el subsuelo, así como la consolidación en el Plan General de un inmueble al que se calificó entonces de "ilegal" por la oposición y que ahora en el gobierno va a hacer definitivo. Lo cual lleva a otra serie de cuestiones como dónde se va a trasladar —sobre plano— la zona verde y qué va a pasar con el permiso que otorgó la Confederación del Júcar para el actual inmueble, porque era también temporal y condicionado a restituir la parcela a su situación original. Y el concurso público que quería lanzarse en el primer trimestre, sin novedades.
