ORIHUELA. El proyecto de gasolinera del Camino Viejo de Callosa, en Orihuela, que ya ha contado con el visto bueno del Ayuntamiento y del Consell, está planeado en una zona de alto riesgo de inundación según el Plan sobre Prevención del Riesgo de Inundación en la Comunitat (Patricova).
No solo está en una zona de riesgo 2, uno de los más alta en la escala que marca este plan, si no que el mismo documento prohíbe el uso y actividad, entre otras instalaciones, de estaciones de suministro de carburantes. Esta prohibición, marcada en el artículo 18 de este documento, aporta, no obstante la salvedad de que "por requerimientos de funcionamiento, queden avaladas por la administración competente para su autorización, garantizándose la adopción de medidas que disminuyan o eliminen el riesgo por inundación".
Esta zona, está marcada como de peligrosidad de nivel 2 porque la probabilidad de que en un año cualquiera se sufra, al menos, una inundación se encuentra entre 0’04 y 0’01, que es el equivalente a un período de retorno entre 25 y 100 años, con un calado máximo generalizado alcanzado por el agua superior a 80 centímetros.
A pesar de que este punto viene recogido en el Estudio de Integración Paisajística realizado para el proyecto, se dio el visto bueno desde este documento argumentando que es una construcción admisible por el planeamiento urbano. En 2016, el Consell aprobó el estudio de inundabilidad de la DIC poniendo al Ayuntamiento como responsable de los proyectos de urbanización que condicionaría la aprobación de la licencia urbanística al correcto diseño de las obras de drenaje.
Sobre este plan de seguridad, que debe asegurarse para permitir una gasolinera en un lugar potencialmente inundable, la Confederación Hidrográfica del Segura ve dudas. Las ve, según su informe, en la documentación sobre este plan de drenaje, que considera deficiente y poco concreto. Afirma que es posible que se necesite una balsa para vertidos y lixiviados y piden más pruebas que garanticen que el vertido de las aguas pluviales son realmente puras. Piden más seguridad para el proyecto de sistemas de drenaje y de evacuación. Ya en 2018, se cita, en una Comisión Territorial de Urbanismo, las dudas de la CHS, que plantea la posibilidad de contaminación accidental o sistémica.
No es el único punto en duda sobre lo óptimo de realizar el proyecto en el emplazamiento previsto en el Camino Viejo de Callosa. La orden de Consellería de Actividades Molestas, Nocivas y Peligrosas califica al plan de peligro medio y de molestia baja. Asimismo, el plan de participación para que los vecinos presentasen quejas o alternativas al proyecto duró un mes y se hizo en pleno verano de 2014, entre mediados de julio y agosto, fechas en las que, muchos de los interesados no estaban presentes para enterarse de la encuesta.
Además de las dudas sobre el plan de inundaciones y de la idoneidad del plan de evacuación de aguas, hay dudas, no se conoce con certeza si ya resueltas, sobre la notificación personal de alegaciones para los vecinos.
Así, en 2016, recuerdan al Ayuntamiento que remitieron un edicto en 2013 para que se procediese a la notificación personalizada a los vecinos propietarios de tierras en el entorno de la futura gasolinera. En 2014, se expuso desde el Ayuntamiento públicamente la DIC pero en ella no se adjuntaba la acreditación de la notificación personalizada a los vecinos.
Esta notificación obligatoria se ha reclamado al Ayuntamiento oriolano, desde el Consell, posteriormente en varias ocasiones. Finalmente, un informe del Ayuntamiento afirma que "se ha procedido a la comunicación personal a los vecinos colindantes" y que se hizo en 2012. No obstante, en 2017 el Consell insiste en que no es suficiente y sigue reclamando la acreditación. En otro escrito de 2017 el Consell considera que la información sobre las alegaciones para los vecinos se hizo en 2016 cuando debió hacerse en 2012. Para el Consell, estas últimas fechas no cuadran y volvieron a pedir la justificación.
Desde el grupo parlamentario de Podemos planean considerar la petición de revisar la DIC para este proyecto, y que, al menos, aclare las dudas suscitadas sobre la idoneidad del proyecto en esta parcela del campo oriolano.