LLÍBER. El PAI Medina de Llíber avanza pese a la manifestación que reunió el pasado domingo a más de mil personas en esta localidad de la Vall del Pop, en la Marina Alta, que exigían que se paralizara el proyecto. El plan tiene previsto edificar un total de 488 casas de lujo en una de las laderas de Llíber, que limita con el paraje de la Serra de Bèrnia y Ferrer.
Pese a la manifestación, las obras de esto proyecto urbanístico siguen adelante, con las actuaciones de construcción de las calles. Los viales, que ya estaban avanzados, van cobrando forma y se creará una avenida principal y algo menos de una decena de ramales, que permitirán el acceso a las nuevas viviendas según se vayan edificando.
La manifestación de este domingo reunió a más de un millar de personas y contó con el apoyo de unas 70 entidades sociales, ecologistas y cívicas. Entre ellas COS, CCOO, ACPV, Escola Valenciana y Agró. La concentración logró reunir en la marcha a centenares de personas que reclamaban la paralización del proyecto, pero esto no ha impedido que los trabajos en la zona sigan.
De hecho, la empresa propietaria de los terrenos sigue con los trabajos en las calles, “para adecuarlas y poder iniciar las primeras obras”, según ha explicado el alcalde de Llíber, Pepe Reus. El primer edil ha mostrado todo su respeto a las personas que se han manifestado en su población, pero ante todo ha pedido a Compromís y a los organizadores que no mientan.
“En la manifestación se lanzaron varias ideas que no son ciertas”, ha precisado el alcalde. Una de ellas es la falta de agua, que según los organizadores de la manifestación sufrirá Llíber, la Vall del Pop y la Marina Alta: “Esto no es así, no sólo no hay falta de agua, sino que habrá más disponibilidad de este recurso”.
El PAI cuenta con un pozo con un caudal “muy elevado”, que la empresa cede a Llíber para que pueda utilizar su agua según considera: “El pozo pasará a ser de titularidad municipal, por lo que no es cierto que nohaya agua”. El alcalde ha indicado que el pozo cuenta con todos los permisos y se ha ejecutado conforme a las indicaciones de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ).
Esto supone, para el alcalde, que habrá “agua para todo Llíber” e incluso para ceder a otras poblaciones en caso de necesidad, pero ha remarcado que estos problemas de falta de recurso de los que alerta “Compromís, no van a ocurrir”. Otro de los puntos en los que se ha detenido Reus es en el tema del alcantarillado.
“Piden la paralización del PAI y lo relacionan con el tema del alcantarillado, confundiendo a la población”, ha indicado el alcalde. Esto está vinculado a la paralización cautelar de las obras del colector que un juez dictaminó el pasado verano, pero el Reus ha recordado que la paralización del proyecto urbanístico en su conjunto “es inviable”. “La empresa es la dueña de los terrenos y cuenta con el permiso de la Generalitat para construir, Llíber no puede paralizar una obra de ese calado porque los dueños reclamarían el pago de una indemnización a la que la localidad no podría hacer frente nunca”, ha remarcado el alcalde.
Precisamente, ha indicado que el alcantarillado que prevé el PAI Medina Llíber y que va ligado a la urbanización del sector, donde se podrán edificar casi 500 viviendas, es bueno para la zona: “Hay un restaurante cercano que utiliza fosas sépticas y se podrá conectar a la nuevas red de alcantarillado, así como una decena de casas que hay dispersas por la misma zona de montaña”.