ELCHE. El viernes tuvo lugar en El Escorxador el II Certamen Literario para la Igualdad y la II Muestra de Cortometrajes para la Igualdad, un ejemplo, como publicó Alicante Plaza, del auge de la concienciación que hay en torno a la lucha contra el machismo en nuestra sociedad. En él se entregaron los premios a las diferentes modalidades y se aprovechó para presentar el último libro de la escritora ilicitana Olga Mínguez Pastor: Victoria viene a cenar. Un ejemplar teatral que versa sobre las dos posturas que hubo sobre el voto de la mujer en la II República, representadas por Victoria Kent y Clara Campoamor. Aunque sin duda, el plato fuerte de la jornada era la proyección de cortos, una iniciativa que ha hecho que chicos y chicas de entre 14 y 18 años se conviertan en pequeños directores para abordar la violencia de género.
El objetivo de este certamen es sumar género y audiovisual, que como comenta Pepe Vidal, de la Casa de la Dona, "es un tema transversal". El objetivo, como indica, es que "los chicos, a través de un lenguaje que conocen desde que nacen como el audiovisual, generen un texto en base a la temática de género. El mero hecho de pasar por todo el proceso de lo audiovisual, desde la creación del guión hasta la edición y la postproducción, hace que asimilen mucho mejor y de una forma más sutil todos estos contenidos". Como indica su compañera de la Casa de la Dona, Cristina Navarro, ya están hartos de charlas, que es lo que se viene haciendo en los institutos: "Se llevan talleres sobre todo de prevención de violencia de género, pero son muy repetitivos y no hay proyectos innovadores que sean más adecuados para esas edades", y añade que "lo audiovisual les motiva".
Lo han hecho ellos mismos con sus medios, ya que como relata Vidal, "la democratización de los medios audiovisuales ha hecho que todo el mundo tenga acceso a alguna cámara, aunque sea de gama baja". No obstante, también les han echado una mano con los medios cuando ha sido necesario porque veían la necesidad de que contaran sus historias y que tuvieran un mínimo de calidad.
Este proyecto se desarrolló en el Consejo de Igualdad y se organiza desde la Casa de la Dona. Es Navarro quien se encarga de la parte de igualdad de género y Raquel Mollá y Pepe Vidal quienes hacen lo propio con la parte audiovisual. La única condición para los cortos era que fueran de temática de género y de menos de tres minutos. Aunque la idea raíz es la prevención de la violencia de género, no es esta la única manifestación del machismo que se ha abordado en los cortos. Como apunta Navarro, este año ha habido una calidad tremenda en los nueve cortos presentados y "no sólo se habla de la violencia en el ámbito de la pareja heterosexual".
Entre otras temáticas, se abordó la realidad laboral de las mujeres de ayer y hoy, el acoso callejero, la vulnerabilidad, la sexualización la mujer en el mundo del videojuego, los estereotipos o una coreografía como símbolo de empoderamiento. "Son temas muy bien trabajados y cercanos a sus vivencias y su día a día", apunta Navarro.
Es una propuesta que se hace a los institutos para que la trasladen al alumnado y se presenten individualmente, pero también se intenta involucrar al profesorado para que lleven la información al aula. Así que por un lado han ido trabajando sobre el material en las horas lectivas con un grupo en Carrús y por la tarde con otro grupo de gente de otros institutos que se había apuntado individualmente.
Se abordó la realidad laboral de las mujeres, el acoso callejero, la vulnerabilidad, la sexualización la mujer en el mundo del videojuego, los estereotipos o una coreografía como símbolo de empoderamiento
Respecto a la violencia de género y su prevención en las aulas, Navarro informa de que "hay mucho que trabajar porque para prevenir esa violencia hay que hacer un trabajo de base desde donde se genera". Cree que a nivel educativo habría que ampliar a más ámbitos esta temática y "que se lleve a edades donde sea razonable la prevención, sobre todo a adolescentes que empiezan con sus primeras relaciones de pareja". No obstante, también piensa que sobre dicha prevención, "mejor empezar desde la infancia porque esto lleva detrás un poso que es mucho más difícil de deshacer, no basta con simplemente y decirles que no se dejen pegar", sentencia.
Al finalizar la proyección de los cortos, hubo un debate entre los y las protagonistas de los cortos y el público asistente, que había llenado la principal sala del recinto. Una parte importante además, puesto que como hace hincapié Vidal, "se trata de utilizar lo audiovisual como una herramienta de cambio". A este respecto, Vidal señala que el elemento diferenciador del lenguaje audiovisual es que "se acerca mucho a la forma de conocer del ser humano, es una forma corporal, muy humana; ánthrōpos viene de aquél que mira arriba, se nos define por la mirada". Esa es la razón, según apunta, por la que en los últimos tiempos se extiende el uso del lenguaje audiovisual en detrimento del lenguaje escrito, "que es mucho más artificioso en su forma de construcción hacia el conocimiento que el audiovisual".