ALICANTE. Las tarjetas revolving no están asociadas solo a entidades financieras. Las hay de supermercados, gasolineras, centros comerciales y, como en este caso, de operadoras de telecomunicaciones. La Tarjeta Visa Vodafone, que comercializaba Bankinter, es una tarjeta revolving y cómo muchas de ellas, aplica intereses abusivos y con una condiciones algo opacas. Esa era precisamente la tarjeta que contrató la alicantina Noelia García Culiáñez en 2015 y que ahora el Juzgado de Primera Instancia 5 de Alcobendas, en Madrid, ha declarado nula.
La reclamación fue presentada por la plataforma especializada en la defensa del consumidor Reclama por Mí, fundada en 2016 en Bilbao y que en la actualidad está presente en toda España con más de 60 abogados. Según ha explicado la plataforma en un comunicado, a Noelia le dijeron que la tarjeta "era una forma sencilla de pagar sus gastos y con la que además, por ser clienta de Vodafone, se beneficiaría de atractivos descuentos en la factura de su línea telefónica". "Me explicaron apenas eso, que podía pagar con la tarjeta y que eso haría que luego me descontaran un tanto por ciento en la factura mensual. Así que, la verdad, pensé que era algo ventajoso y dije que sí".
Un descuento que recoge la propia sentencia: el 2% del importe de cada compra realizada con la tarjeta en forma de pago aplazado se aplicaba como descuento en la factura mensual Vodafone. Para compras realizadas en forma de pago fin de mes, el importe a descontar en la factura Vodafone será el 0,5% del valor de cada compra. Estas ventajas, que eran reales, escondían según Reclama por Mí "unos intereses abusivos, como el TAE del 26,89% aplicado a Noelia en los pagos aplazados que realizaba". Estos intereses han sido considerados usurarios por el Juzgado, que además recoge en el fallo los diversos cambios en las condiciones que regulaban el contrato que Bankinter realizó durante la duración del mismo y que la entidad no comunicó a la clienta.
"De repente cambiaron todo. Me empezaron a cobrar todos los meses una cantidad fija, independientemente de lo que yo hubiera gastado. Y todo eso, sin informarme y sin que yo aceptase esos cambios", explica Noelia. Todo ello llevó a esta alicantina a demandar a Bankinter a través de Reclama Por Mí, abogados expertos en reclamaciones antiusura. "Vi que podía demandar y que era la única forma de acabar con esta pesadilla", explica. Una demanda que ha tenido su fruto y así, en la sentencia, el juez declara nulo el contrato de la tarjeta revolving Visa Vodafone y obliga a Bankinter a devolver exactamente un total de 2.194 euros, cantidad que excede de lo dispuesto por la afectada.
"Yo por fin he acabado con esta situación, pero por eso mismo quiero alertar a todo el mundo de que no contrate este tipo de productos. Esconden unas condiciones abusivas y que nadie te explica cuando te los ofrecen", afirma Noelia.
"Como hemos denunciado ya en varias ocasiones, las tarjetas revolving son muchas y muy distintas. De hecho, es posible que la gente lleve una en su cartera sin saberlo. Alcampo, Carrefour, Iberia, Inditex… y, como en este caso, Vodafone", explica Fernando Renedo, socio cofundador de la plataforma.
"Es necesario seguir luchando contra este tipo de producto financiero porque son muchas las personas atrapadas en sus consecuencias: un endeudamiento cada vez mayor y que parece interminable en el tiempo. Por eso, animamos a cualquier persona que se encuentre en esta situación a reclamar las tarjetas revolving, a hacerlo a través de profesionales y a salir de la espiral de deuda en la que las tarjetas revolving le han sumido", añade Renedo.