El jefe de la Policía Local de Santa Pola, José Miguel Zaragoza, ante los medios. Foto: EFESANTA POLA (EFE). El jefe de la Policía local de Santa Pola, José Miguel Zaragoza, en libertad con cargos por supuestas irregularidades en la compra de uniformes, continúa con normalidad en su puesto y, además de reiterar su inocencia, ha defendido su "honestidad" y "transparencia" en todas sus decisiones.
Zaragoza ha comparecido este jueves ante varios medios de comunicación en la jefatura de la Policía local para "dar la cara", acompañado de su abogado, José Pedro González Rubio. En esa comparecencia, ha leído un comunicado y ha respondido a varias preguntas, en las que ha negado "con rotundidad" que haya efectuado cualquier tipo de irregularidad.
Además, ha asegurado que los registros llevados a cabo el miércoles por la UDEF en la jefatura y tanto su detención como las de dos oficiales (uno de permiso y otro en activo) fueron "desproporcionadas y han carecido de motivación alguna", ya que "de lo acontecido no había ninguna prueba ni indicio alguno que justificara tan drástica medida".
Zaragoza fue arrestado ayer junto a los dos agentes, el exconcejal de Seguridad y cinco personas más (empresarios) por la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional por supuestas irregularidades en la compra de uniformes, y tras declarar fue puesto en libertad con cargos porque se le atribuyen los supuestos delitos de malversación, falsedad documental, fraude y prevaricación.
El jefe de la Policía Local ha explicado que conoce los delitos que se le imputan pero desconoce las conductas concretas presuntamente irregulares que le atribuyen, debido al secreto de las actuaciones dictado por el Juzgado de Instrucción 3 de Elche.
Sostiene que la denuncia "incierta e infundada" que motivó su detención fue interpuesta por el equipo de Gobierno "con cierto interés"
En todo caso, ha informado de que la denuncia ha sido interpuesta por el equipo de Gobierno, que forman el PSPV-PSOE, Compromís, EU-IU, Sí Se Puede Santa Pola y dos no adscritos, pese a que la misma es "incierta, infundada" y ha sido presentada "con cierto interés" que no ha querido aclarar.
Zaragoza es jefe de la Policía Local desde 1995, ocho años antes de que su hermano, Miguel Zaragoza, ocupara la Alcaldía de la ciudad por tres mandatos consecutivos con el PP (2003-2015).
El jefe del cuerpo ha relatado que hasta el momento nadie del equipo de Gobierno se ha puesto en contacto con él y que sigue trabajando porque debe ejercer su labor "con la total normalidad que da saber que niego los delitos o conductas que se me puedan atribuir". "Además, doy la cara para expresar mi total rechazo a la comisión de estos tipos de delitos", ha indicado, antes de apuntar que, cuando se levante el secreto de las actuaciones y se aclare todo, dará cuenta de "qué interés ha habido en todo este asunto" y también ha dicho que se reserva las posibles acciones legales contra las personas que han "instigado" lo ocurrido.
