ELCHE. Desde el Institut d'Estudis Comarcals del Baix Vinalopó (IECBV) han manifestado su indignación respecto a la licencia de derribo que ha aprobado la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Elche sobre el que fue el edificio de Almacenes Parreño, uno de los inmuebles más emblemáticos de la calle San Salvador. El año pasado pidieron su protección.
"No nos parece que se ajuste a la legislación patrimonial vigente la aprobación de una licencia de derribo sin el visto bueno patrimonial de una licencia que garantice la edificación sustitutoria segundos el que marca la ley (artículo 13.7 del Decreto 62/2011)". Una licencia de edificación que aseveran "tendría que cumplir los estrictos parámetros respecto de las tipologías arquitectónicas preexistentes a los núcleos históricos tradicionales (artículo 8 del Decreto 62/2011), en este caso el de Elche".
En este sentido, valoran negativamente la "negligencia de la administración local en su obligación legal de protección del patrimonio que ha comportado que este edificio no se haya incluido a tiempo en el Catálogo de Edificios Protegibles. Encima de la mesa había otras alternativas para salvar el edificio –y de las cuales nos hemos enterado por la prensa, como la compra del inmueble para destinarlo a un uso público– que no entendemos por qué no se han tomado".
Consideran que es "otro episodio de desprotección del patrimonio arquitectónico local al núcleo histórico tradicional, en un momento en que empiezan a quedar muy pocas muestras. La negligencia de la administración local en cuanto a la protección del patrimonio, desoyendo constantemente los mandatos de la legislación patrimonial vigente, ha comportado, entre otros, el retraso del nuevo catálogo", y añaden que mientras esta herramienta "fundamental" no se acabe de desarrollar, casos como este serán una constante. En todo caso, esgrimen, "el Ayuntamiento podría haber estudiado a tiempo el valor patrimonial del inmueble antes de que todo esto se aconteciera y haberlo incluido en el catálogo vigente, así como otras muchas piezas de nuestro municipio que todavía no son presentes en el listado actual".
"El valor del edificio a que nos referimos en la calle San Salvador es innegable. Es un muy buen ejemplo de las construcciones que desarrolló la incipiente burguesía mercantil local entre finales del siglo XIX y principios del XX. Además, los sillares de piedra de la base del edificio son más antiguos, y nos podrían retrotraer hasta el siglo XVII. A pesar de que en esta calle se han permitido muchas barbaridades arquitectónicas, se siguen conservando otras construcciones de este tipo que otorgan contexto a la construcción a que nos referimos".
Añaden que "estas construcciones que sustituirían en casos excepcionales las construcciones patrimoniales de los núcleos históricos tradicionales tienen que ser casi un calco según el espíritu del Decreto 62/2011, estén o no estén incluidas en un Catálogo de Edficios Protegibles", y que según el Plan General,los edificios del Núcleo Histórico Tradicional tienen que respetar los elementos de valor.
"Pedimos que se haga público todo el expediente, desde la misma declaración de ruina, de acuerdo con el que marca la legislación vigente y los estándares de transparencia. Pedimos, además, que la administración local que tiene que revisar los proyectos de edificación sustitutoria excepcionales que se puedan dar al núcleo histórico y tradicional, haga cumplir la ley haciendo que estas nuevas construcciones se ajusten al por menor tipológico de los edificios preexistentes y que considere la posibilidad de compra del inmueble, antes de que sea demasiado tarde, como última opción para proteger este bien patrimonial histórico y etnográfico de nuestro pueblo".
