Tienda de Botticelli en la avenida de Maisonnave de Alicante, el pasado verano. Foto: RAFA MOLINAALICANTE. Las restricciones al comercio derivadas de la pandemia del coronavirus siguen cobrándose víctimas entre el tejido alicantino. La última en sucumbir a la caída del negocio ha sido la cadena alicantina de zapaterías multimarca Botticelli, que acaba de pedir el concurso de acreedores voluntario para una de sus filiales, dedicada a la explotación de varias tiendas físicas de la enseña.
El grupo Botticelli, con sede en Finestrat aunque sus oficinas centrales están en la capital alicantina, es uno de los máximos referentes del comercio minorista de calzado con 'adn' alicantino. Presente desde hace años en la 'milla de oro' de Alicante, en el número 9 de la avenida de Maisonnave, y en los principales centros comerciales y localidades de la provincia, la red de Botticelli llega hasta Valencia, Murcia, Albacete, Madrid y Cataluña.
La empresa, dedicada a la compraventa y comercialización minorista de calzado de diversos fabricantes, ha tenido que enfrentarse como el resto de su competencia a los rigores de la crisis sanitaria, que primero obligó a cerrar sus establecimientos tres meses, luego permitió reabrirlos con restricciones de aforo, y desde hace unas semanas ha añadido además la limitación horaria por las tardes. Un contexto en el que, además, la incertidumbre económica y la propia prevención de los consumidores ha reducido la afluencia a los puntos de venta físicos, su principal canal.
El Boletín Oficial del Estado publica este miércoles el edicto del juzgado de lo Mercantil número 2 de Alicante en el que se informa de la declaración del concurso de acreedores de Cobalto Shoes, voluntario (es decir, solicitado por la propia mercantil) y ordinario. Como administrador concursal ha sido designado el abogado José Luis Valdés, con el que este diario intentó contactar sin éxito este miércoles, al igual que con la empresa.
Según las últimas cuentas de la mercantil, Cobalto Shoes facturó 632.000 euros en 2019, antes de la pandemia (un 14% más), pese a lo cual incurrió en pérdidas de más de 100.000 euros. La razón, según el informe de gestión, fue el recurso a agresivas promociones para aumentar las ventas y la reducción del margen de la empresa. En esos momentos, la firma se planteaba cerrar los puntos de venta menos rentables, según el informe. El balance de 2019 refleja por contra una situación saneada, con fuertes recursos propios y un pasivo corriente testimonial, sin deuda bancaria.
El grupo Botticelli está dirigido por la sociedad holding Turquesa Sport, de la que penden cuatro sociedades: dos patrimoniales y dos dedicadas al comercio minorista de calzado. Una de estas últimas, Calzados Crubel, es la que asume la gestión de las tiendas de Botticelli a través de otras cinco filiales, una de las cuales es la citada Cobalto Shoes. Hasta el momento, solo consta que se haya declarado en concurso de acreedores la citada filial.
