ALICANTE. Como usar la archiconocida app para pedir comida a domicilio Just Eat, pero con productos frescos de mercado en lugar de platos preparados. Esa es la experiencia que el emprendedor tecnológico alicantino Guillermo Sánchez y sus dos socios han querido recrear en su nuevo proyecto, Lebbel, para comprar online desde el sofá de casa carne, charcutería, fruta o verdura en los puestos de los mercados de abastos.
La aplicación, que se lanzará esta semana en su versión Android e iOS, ya está disponible en la página web de la empresa, y permite realizar compras en una decena de puestos del Mercado Central de Alicante, pero la idea es incorporar progresivamente más puestos y más mercados. "Es una idea muy sencilla", explica su fundador, "solo tienes que seleccionar el tipo de producto que te interesa comprar, elegir entre los puestos disponibles y añadir el producto al carrito". Excepto los fines de semana, el pedido llega al día siguiente.
Sánchez puso en marcha con dos socios hace unos años el proyecto Flexoh, una plataforma que permite a las empresas (y a sus empleados) gestionar la retribución flexible (el pago 'en especie'). Con este proyecto ralentizado debido al estado de alarma, Sánchez decidió poner en marcha con Alejandro Sánchez y José Miguel Palao otro proyecto que uniese tecnología, apoyo al pequeño comercio y a los consumidores, y en dos meses nació Lebbel. Inicialmente "lo pusimos en marcha yo y otro socio de Flexoh, junto con un amigo, y luego han entrado dos inversores".
"Nuestra principal motivación fue la de impulsar el comercio de cercanía; cada vez se compra más en el supermercado por la rapidez y sus opciones online, algo negativo porque el dinero se centraliza en las grandes capitales y no se reinvierte en la propia ciudad", explica el fundador de Lebbel. "Por supuesto, comprando en comercio local gana el medio ambiente, nos alimentamos mejor, etcétera. Realmente es lo lógico y hacia donde tiende el mundo ahora mismo".
El target de la app son las personas que aprecian la calidad extra del comercio tradicional pero no tienen tiempo para ir a hacer la compra. "Con el tipo de vida que llevamos, trabajo, niños... nos cuesta sacar tiempo para estar 2 o 3 horas comprando en el mercado", argumenta Sánchez". Con Lebbel se hace la compra en una media de 10 minutos y, una vez superados los posibles miedos iniciales, es exactamente igual que comprar en persona".
El reparto corre a cargo de Lebbel, al contrario que en otras plataformas similares. "Queríamos controlar el negocio de principio a fin, para mejorar la experiencia del cliente". Así, la app evita los problemas logísticos en el reparto de frescos. "Te registras al finalizar la compra, no tienes ni que confirmar el registro, porque nosotros no hacemos negocio con los datos", defiende Sánchez.
El plan de crecimiento del negocio es ir ampliando puestos y zonas de reparto de forma acompasada a las ventas. "La cantidad de pedidos que recibamos decidirá cuán grande se hace el proyecto". Por ahora es una startup que ha salido al mercado, en dos meses, con el enfoque del 'mínimo proyecto viable' y con una estructura muy ligera. De momento se atienden de 10 a 20 pedidos al día, y lo que más se compra es fruta y verdura fresca, que podría ser el producto gancho de la app. "Realmente hay muy pocos pedidos sin fruta o verdura".