ALICANTE. El sainete continúa. Las notas 'informativa' y 'aclaratoria' de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) de la tarde del domingo sobre el tristemente famoso Deportivo-Fuenlabrada estuvieron salpicadas de comunicados por parte de esos dos conjuntos y del Elche.
Sin duda, fue el comunicado del club azulón el que llevó a la LFP a desdecirse parcialmente de su anuncio de que el citado partido no se disputaría y que el Elche sería el que jugase el 'play-off' de ascenso. Lo anterior es lo que la patronal quiere, pero el Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) es el que en todo caso ha de decidirlo.
El Dépor, por su parte, ponía una vez más el grito en el cielo y hablaba incluso de "atropello", toda vez que la mañana del domingo había conocido que se le había abierto al Fuenlabrada un expediente disciplinario en el seno de la LFP (algo que era un secreto a voces, pero que no fue oficial hasta que lo dijo en su primera nota dominical la patronal).
Y el Elche publicitaba una "carta de agradecimiento" al Fuenlabrada, casi a la misma hora que precisamente este decía que no hacía el sacrificio por el que el club franjiverde le elogiaba. Lo llamativo no era solo eso, es que la misma finalizaba con el anuncio de que había retirado horas antes las alegaciones presentadas la mañana del martes ante el Comité de Competición de la RFEF, pidiendo que se le diera por perdido por incomparecencia al Fuenlabrada el partido frente al Deportivo.
Más allá de que esas alegaciones del Elche tuvieran pocos visos de prosperar, pues resulta complicado que se considerase que hubo incomparecencia del conjunto madrileño toda vez que el partido había sido suspendido (el club franjiverde venía a defender que esto último era consecuencia de una negligencia del Fuenlabrada a la hora de cumplir con el protocolo anti-Covid y sí cabía hablar de incomparecencia en los términos que lo hace el Código Disciplinario de la RFEF), a diferencia de las del Deportivo (este apostó por el cajón de sastre del artículo 68 del citado Código Disciplinario, el de las conductas contrarias al buen orden deportivo), resulta extraño que el club franjiverde hubiese tomado esa decisión cuando es el primero que sabe que Competición es la que ha de resolver sobre todo lo que rodeó al Deportivo-Fuenlabrada (por ejemplo, la suspensión definitiva del partido que anunciaba la LFP sin encomendarse a nadie, teniendo luego, en el colmo de los colmos, que rectificarse a sí misma).
