ELCHE. Aunque las obras para la puesta en valor del refugio de Germanías así como el entorno de la plaza están ya en marcha (una actuación Edusi), una cuestión aparejada a la actuación y que ha sido la protagonista durante meses ha sido el de la cruz de Germanías, construida en el franquismo sobre un monolito republicano, en homenaje a los vencedores de la Guerra Civil, pero a la que se retiró la placa —con lo que Ruz defiende que ha perdido su significado franquista—. PSOE y Compromís no pudieron retirarla durante su gobierno, aunque era su intención en el proyecto, y ahora con el cambio de colores, con PP y Vox, que defienden que es un monumento "a la concordia", la mantendrán. La Junta de Gobierno ha aprobado ahora un informe municipal con el objetivo de protegerla.
La portavoz de la Junta, Inma Mora, destaca que la Dirección General de Memoria Democrática, "recién creada", necesita un informe por la tipología del monumento, ya que el Ayuntamiento ha solicitado de forma cautelar, lo que ha explicado a través de un comunicado, a la Dirección General de Calidad Democrática la paralización de la obligación de la retirada de este monumento del Catálogo de Vestigios Contrarios a la Memoria Democrática y la Dignidad de las Víctimas.
Para el Ayuntamiento la decisión es "irrevocable", especifica Mora, para poder "blindarla" y que su mantenimiento o retirada dependa de los posibles cambios de gobierno. "Es un monumento histórico de la concordia que se tiene que quedar, y no se puede destruir", indica la edil, acerca de los planes de retirarla en palés como pretendía el anterior Ejecutivo.
Posteriormente, el vicealcalde y concejal de Urbanismo, Francisco Soler, señala que por ahora tan solo es un paso previo, para conocer qué alcance puede tener esa protección, esgrimiendo que creen que "cumple todos los requisitos de Memoria Histórica", arguyendo que es un símbolo "que no tiene nada que ver con lo que se quiere poner en la mesa", explica, sobre la referencia de la dictadura a la que alude la oposición, ya que han llevado al Defensor del Pueblo el mantenimiento del monumento, recordando que la ya extinta Conselleria de Calidad Democrática en 2022 incluyó la cruz como uno de los elementos a retirar. No obstante, con el cambio de gobierno en el Consell, está por ver cuál será su posición, eso sí, tras el primer informe municipal que ahora se ha encargado.
