ALICANTE. Compromís cierra el círculo en la ronda de conversaciones sobre el presupuesto del Ayuntamiento de Alicante para 2019: año electoral y primero ya sin el control previo del Ministerio de Hacienda tras la cancelación del Plan de Ajuste. Los tres concejales de la coalición (Natxo Bellido, María José Espuch y Sonia Tirado) se sentaron finalmente este miércoles junto al edil de Hacienda, el popular Carlos Castillo, para trasladarle el listado de aportaciones que la formación considera prioritarias en la planificación económica municipal. Y lo cierto es que el encuentro, que se hizo esperar cerca de dos semanas respecto a las reuniones entabladas con el resto de grupos de la oposición, como mínimo sí pudo interpretarse como el inicio del deshielo en las relaciones entre los dos partidos.
El trato entre ambos permanecía congelado (podría decirse que limitado al enfrentamiento) desde que trascendió la controversia sobre los acuerdos suscritos con la fundación Escola Valenciana durante la etapa en la que Compromís desempeñaba competencias de gobierno y desde que los nacionalistas presionasen con iniciativas sobre la gestión de la edil de Urbanismo, Mari Carmen de España, sobre los pagos a Más Portal o los contratos suscritos con el asesor del PP cesado por un supuesto de incompatibilidad. A partir de ese momento, se han reproducido las críticas; las exigencias de dimisión de concejales de las dos bancadas; los reproches sobre cuestiones identitarias y las acusaciones de ninguneo.
Toda esa discusión quedó al margen (al menos temporalmente) en el encuentro de este miércoles. La reunión se desarrolló durante cerca de dos horas. Y las dos partes coincidieron en calificar la cita como positiva. Compromís apeló a su actitud responsable en cuestiones como la cancelación del plan de ajuste o las modificaciones de crédito (a las que no votó en contra) y, así, reivindicó su legitimidad y capacidad para formular aportaciones a las cuentas. Y Castillo se mostró receptivo y dispuesto a estudiar la incorporación de algunas de ellas. Eso sí, los nacionalistas ya anticiparon que, salvo que se admitiesen todas su peticiones, como máximo podrían contemplar su abstención en el momento en el que la propuesta se eleve a aprobación en el pleno (previsiblemente, en la primera quincena de febrero).
¿Qué propuestas planteó Compromís? En gran parte, las ya conocidas. Que se ampliase la bolsa de ayudas al pago del IBI para familias desfavorecidas; que se impulsase la construcción de la tercera escuela infantil municipal; y que se reflejase dotación económica para tres de sus propuestas fetiche: el centro para emprendedores del antiguo matadero, conocido como Capçalera; el centro de intrepretación de la Guerra Civil en Alicante y la redacción del Plan Ciudad. Además, reivindicaron que se ampliase la partida destinada a la Concejalía de Comercio en respuesta a las reivindicaciones formuladas desde las asociaciones de comerciantes de la ciudad.
El edil de Hacienda, por su parte, agradeció la implicación de Compromís y se comprometió a "estudiar la incorporación de algunas de sus demandas para lograr el máximo consenso posible sobre las cuentas municipales". Así, se mostró dispuesto a ampliar "el fondo de ayuda para el pago del IBI y la inclusión de una partida económica para la redacción de un proyecto para la construcción de una nueva escuela infantil".
Sobre el impulso al proyecto de Capçalera, el concejal de Hacienda planteó "incluir su financiación en el documento anexo" de compromisos políticos que se llevará al pleno extraordinario con el propósito de buscar formulas de financiación para su desarrollo en otras administraciones. En esta línea, recalcó que la inversión necesaria para llevarlo a término, 4,5 millones, sería asumible en el caso de que se contase con "el respaldo de la Generalitat y con la ayuda de fondos europeos", concluyó.
En cualquier caso, el portavoz de Compromís, Natxo Bellido, dejó claro que "no podríamos asumir un brindis al sol ni anuncios a futuro, si no una propuesta con compromisos serios y creíbles", incidió. Así, reafirmó que la posición de los tres ediles de la coalición en el pleno podría oscilar entre el rechazo y la abstención. En esa tesitura, el PP seguiría contando sólo con la garantía de sus 8 votos a favor. La posición de PSOE, Guanyar y Ciudadanos sigue en el aire.
De hecho, la portavoz del grupo municipal de Ciudadanos (Cs), Yaneth Giraldo, volvió a insistir este miércoles en que "el PP se está haciendo el remolón a la hora de reflejar en los presupuestos de 2019 una partida específica para iniciar los trabajos de un nuevo plan de ordenación urbana". En esta línea, Giraldo insistió en exigir "al PP un compromiso firme y una voluntad real de poner en marcha la Oficina del Plan General, desmantelada por el anterior alcalde por sus desavenencias con Pavón, y que eso tenga una traducción clara en los presupuestos".
La líder de Cs recordó que "de momento el borrador solo contempla 131.600 euros, frente a la partida inicial de 500.000 que reclamábamos, y con un epígrafe ambiguo donde se dice Plan de Urbanismo 'y otros'". "Alicante no puede seguir estancada en la parálisis y en cuestiones tan estratégicas como es el planeamiento urbanístico, frente a la agilidad de municipios próximos como Dénia o Benidorm que sí que están haciendo sus deberes", añadió Giraldo.
En este contexto, también reclamó "mayor concreción en la partida de 100.000 euros para 'estudios' de la limpieza y recogida de basuras, ya que la prioridad, y así lo dejamos claro en las reuniones mantenidas con el grupo de Gobierno, la prioridad es la de ejecutar un análisis exhaustivo del cumplimento del pliego de condiciones".
Giraldo criticó también "la partida destinada a las inversiones que se deciden desde las juntas de distrito, ya que se podría haber elevado el porcentaje, fijado ahora en un 5% del presupuesto, si de verdad se pretende fomentar la participación". "También vamos a exigir que las ayudas destinadas a la escolarización de cero a tres años sigan los mismos criterios que los que establece la Generalitat, para que se tengan en cuenta los niveles de renta, incluidos los de las familias numerosas, con el fin a que este dinero vaya aparar a quien más la necesite", concluyó.