ALICANTE. El Real Liceo Casino de Alicante sigue adelante con sus planes para volver a abrir la zona 'gourmet', pese a las trabas judiciales del grupo de ocho barristas originales que se resiste a abandonar sus espacios, tal como desveló este miércoles Alicante Plaza. Según explican fuentes de la empresa a la que la institución que preside Joaquín Galant ha encargado reabrir el espacio gastronómico, Explanada 16 Casino SL (creada por el grupo hotelero de Muro d'Alcoi que llegó a pujar por el centro comercial Panoramis, Vilaplana Pérez Hermanos), los planes son reabrir esta zona en el mes de junio, a tiempo para aprovechar la afluencia por la celebración de Les Fogueres.
No obstante, y dado que para entonces es más que probable que aún no se haya resuelto el conflicto con los anteriores barristas (ocho de los dieciséis que empezaron), la nueva zona 'gourmet' del Casino abrirá utilizando solo el espacio que la institución ha podido recuperar, mayoritariamente en la primera planta (incluida la terraza y el Salón Imperio, donde se está llevando a cabo una reforma en la decoración). Es decir, en junio quedarán sin uso las barras de los empresarios que forman el citado grupo, y que como ha contado este diario están peleando en los tribunales por mantener la ocupación de sus barras.
Y puede que la disputa se alargue al menos unos meses, puesto que este miércoles el juez de Primera Instancia número 4 ha aceptado los argumentos del demandado, representado por el abogado Pedro Vicente Arnedo, y ha acordado transformar el procedimiento especial de desahucio iniciado por el Real Liceo Casino en un procedimiento ordinario. Como sucedió en el caso de Primera Instancia 6, el juez considera que el contrato entre los barristas y la institución, con el grupo Arcotech como intermediario (era la empresa encargada de la gestión, que impulsó el proyecto), es "complejo" y por tanto no puede decretar automáticamente el desahucio en base a los impagos.
De esta forma, hay un caso en el que la disputa se sustanciará en un procedimiento ordinario, otros dos en los que los jueces han aceptado la solicitud en este sentido de los demandados y cuyas resoluciones están recurridas por el Casino y pendientes de respuesta, y otro más en el que el demandado ha presentado la solicitud para convertirlo en ordinario y está pendiente de respuesta. También hay, del otro lado, una orden de desahucio ya ejecutada. Así lo confirma el abogado que representa a la institución, que ha contratado para ello al despacho Trialegal, fundado por el decano del Colegio de Abogados, Fernando Candela.
El letrado del Casino defiende el recurso de la institución a los procedimientos de desahucio, puesto que los barristas demandados acumulan varios meses de impago del alquiler, y en algunos casos "no han pagado ni una sola mensualidad desde que empezaron". La directiva de la institución, asegura, les ofreció la posibilidad de condonar la deuda si renunciaban a las barras, sin acuerdo. Asimismo, señala que fue este grupo quien, tras romper su relación contractual con Arcotech en junio y hacerse cargo de la gestión como Agrupación de Interés Económico (que no llegó a registrarse), pidió al Casino cerrar el pasado mes de agosto para realizar unas reformas. En septiembre, llegaron ofertas de dos grupos distintos de barristas para asumir la gestión, aunque la institución rechazó ambas porque "estaban muy por debajo del precio de mercado", según este abogado.
Fue entonces, según explican desde el despacho Trialegal, cuando el Real Liceo comenzó a escuchar ofertas de interesados en hacerse con la explotación de la zona 'gourmet', que hasta ahora ha ocasionado más gastos que ingresos a los socios, tanto en mensualidades impagadas como en suministros de luz y agua, que han tenido que asumir. Entre los al menos seis interesados, siempre según el letrado, el Casino optó por el grupo de Vilaplana Pérez Hermanos, que está ejecutando las obras para reabrir en junio. En este caso, el contrato no es de gestión, como sucedía con Arcotech, sino directamente de alquiler de espacios. Un espacio que no incluirá, en tanto no haya resolución judicial favorable, las barras en disputa.