La edil de Educación, Julia Llopis, en una visita a las instalaciones de las escuelas infantiles municipales.ALICANTE. El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Alicante, el bipartito compuesto por Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs), ha validado este jueves, en la comisión de Asuntos Sociales y Culturales, la modificación de los estatutos del Patronato de Escuelas Infantiles municipales tras rechazar las propuestas de enmienda formuladas por las tres formaciones que conforman el eje progresista en la corporación municipal: PSOE, Unides Podem EU y Compromís. El acuerdo ha prosperado con los votos de los dos socios al frente de la gestión municipal y el respaldo de Vox, mientras que los tres partidos opositores restantes han votado a favor de la incorporación de sus aportaciones.
Con el resultado de la votación, las tres formaciones han recriminado la desestimación de sus sugerencias en base a la propuesta formulada por la Concejalía de Educación que coordina la popular Julia Llopis. En primer término, la portavoz adjunta del PSOE, Trini Amorós, ha afirmado que "hemos asistido a la máxima expresión del señor Barcala de hacer oposición a la oposición al no contemplarse ni una sola enmienda del PSOE ni del resto de grupos políticos". Amorós ha indicado que el bipartito ha votado en contra de la propia normativa municipal aprobada por ellos mismos en cuanto al uso del lenguaje inclusivo, aunque fuentes del equipo de gobierno han sostenido, a posteriori, que sí se aplicará esas modificaciones en el momento en el que la propuesta se eleve a la consideración del pleno.
Sea como fuere, Amorós ha indicado que "Barcala sigue en la cerrazón más absoluta al excluir del Patronato de las Escuelas Infantiles Municipales a padres y madres, lo que es un hecho gravísimo. Ahora entendemos el porqué este alcalde evitó comparecer ante el pleno para explicar el caótico comienzo del curso en Alicante".
En esta línea, Amorós ha destacado que "el director del Patronato Municipal de Educación Infantil afirma en su informe que no hay nada que impida que se acepten las enmiendas". "No constituyen el objeto del presente informe, al efectuar valoraciones de criterio o idoneidad", es decir, valoraciones de carácter política, añade el PSOE. Además, según Amorós, la posición de Barcala "trata de premiar a las escuelas privadas, eliminar del Patronato de Escuelas Infantiles la representación de los trabajadores y tener un poder total para nombrar y cesar a sus directoras o directoras".
En segundo lugar, la edil de Unides Podem EU, Vanessa Romero, ha señalado que "es incomprensible que el equipo de gobierno y sus muletas hayan votado en contra de una enmienda que propone denominar 'escuelas de madres y padres en lugar de 'escuelas de padres', aún habiendo sido aceptada por el informe técnico. Es terrible que hayan votado en contra de enmiendas aceptadas previamente por el informe técnico y, haciéndolo, se han saltado normativas municipales de instancia mayor como el plan de Igualdad".
A su juicio, "una vez más hemos asistido a la escenificación del desmantelamiento de las escuelas municipales infantiles. La señora Llopis sigue empecinada en mantener a las posibles voces críticas con su gestión fuera de la Junta Rectora del Patronato de Educación Infantil: ni representación de las AMPAs de las escoletas, ni de trabajadoras, por no hablar de la elección de la dirección de las mismas, totalmente discrecional y arbitraria.
La señora Llopis continúa con su agenda pro lobby de la concertada y privada. Estos estatutos recortan la participación, niegan a las familias la opción de expresarse donde corresponde, y abren la puerta a la privatización de la educación pública infantil", ha concluido.
Por su parte, el concejal de Compromís, Rafa Mas, ha considerado que "la derecha se extremiza. Y vota en contra del lenguaje inclusivo. Han votado en contra de todas las enmiendas de la oposición junto con Vox e incluso han votado en contra de las consideraciones de los técnicos. Rechazan la participación de los padres y madres, de la representación de los trabajadores. Incluyen asesores del sector privado y religioso en un patronato de las escuelas municipales públicas. Rechazan el lenguaje inclusivo. Para la derecha y la presidenta, Julia Llopis, ya no hay madres en el Patronato. Son todo padres, trabajadores y alumnos. Aceptan el desvío de alumnado al sector privado. Ejecutan un duro golpe a las dos escuelas infantiles. Dejan de ser plurales, públicas, inclusivas y las convierten en un cortijo ideológico. Son representantes públicos para defender los intereses privados".
En esta línea, fuentes de Compromís han apuntado que registraron "seis enmiendas a la propuesta de modificación de estatutos del Patronato Municipal de Educación Infantil, con tal de "garantizar su futuro y blindarlas ante intentos privatizadores, sin que haya sido aceptada ninguna", según ha incidido Mas.
Para Mas, "nos encontramos ante el enésimo intento de privatización de las dos únicas escuelas infantiles municipales de la ciudad por parte de Julia Llopis. Los cambios allanan el camino para desviar alumnado a las escuelas privadas". En este sentido, Mas ha asegurado que "desde Compromís hemos intentado con las seis alegaciones blindar las dos escuelas infantiles públicas, que se contemple con urgencia la construcción de una tercera, ampliar la participación en el patronato y eliminar el sesgo ideológico para que los asesores o asesoras que nombre discrecionalmente la concejala procedan de la educación pública".
