ALICANTE (EFE). El TM Benidorm quiere despedir el año 2023, este martes en el Palau, con una alegría ante el Fraikin Granollers (21 horas) en un encuentro marcado por el regreso, por primera vez como rival, del portero Roberto Rodríguez.
El guardameta sevillano, pese a su juventud, dejó huella en el club y en la afición durante cuatro temporadas, en las que pasó de ser una promesa a una realidad del balonmano español, por lo que su regreso a la que fue su pista será uno de los alicientes del encuentro.
El partido no llega en un buen momento para el equipo de Sergio Carballeira, que tras ilusionarse con la posibilidad de disputar la Copa Asobal ha sumado dos derrotas consecutivas que le han devuelto a la zona media de la tabla.
El conjunto catalán llega a Benidorm en tercera posición, aunque con una dinámica de derrotas, ya que también ha perdido sus dos últimos compromisos.
Carballeira no podrá contar una semana más con Filip Vujovic, Pepe Oliver y Laucha Robledo, lesionados, por lo que tendrá que completar la convocatoria con jugadores del filial.
"Venimos en una dinámica mala y es un partido importante. Tenemos bajas, pero no hay excusas", afirmó el preparador gallego.
"Tendremos que hacer las cosas muy bien si queremos sumar algún punto. Queremos refrendar una primera vuelta notable con una victoria más ante un rival durísimo", añadió el técnico.
