BENIDORM (EFE). El Balonmano Benidorm, cuya plantilla y cuerpo técnico se encuentra en cuarentena tras varios casos positivos por COVID que, posteriormente, fueron refutados por unos nuevos test, confía en que la EHF aplace su partido de vuelta ante el Fivers de Viena y plantea el 13 de octubre como posible fecha del encuentro.
El conjunto benidormense tenía previsto disputar el encuentro de vuelta de la segunda eliminatoria de la EHF European League, competición en la que debuta, este martes, pero la Conselleria de Sanidad de la Comunidad Valenciana no ha permitido al equipo viajar tras dar positivos varios jugadores el viernes, a pesar de que las últimas pruebas PCR y serológicas a los posibles afectados dieron negativas.
El club, con el apoyo de la Real Federación Española de Balonmano (RFEBM) y de varias entidades locales y autonómicas está intentando convencer a la EHF para que no dé por perdido el partido al equipo y aplace el encuentro a una nueva fecha una vez se haya cumplido la cuarentena.
El Benidorm entiende que su cuarentena comenzó el pasado viernes por la noche, 25 de septiembre, por lo que argumenta que una fecha apropiada para disputar el encuentro de vuelta, en el que defenderá tres goles de renta, puede ser el 13 de octubre, días después de competir ante el Nava.
El sorteo de la fase de grupos se realizará este jueves, pero la competición comenzará el 20 de octubre, por lo que el Benidorm entiende que no supondría un gran perjuicio incluir en el bombo al ganador pendiente de su eliminatoria.
