BENIDORM (EFE). El Balonmano Benidorm afronta este miércoles sin confianzas la visita al Amenabar Zarautz (19:45 horas) en una eliminatoria a partido único de la Copa del Rey, competición en la que el conjunto alicantino ha depositado muchas esperanzas esta temporada.
El conjunto de Zupo Equisoain es claro favorito ante un equipo que se ha convertido en un gran rival deportivo en las últimas temporadas, ya que el conjunto vasco fue adversario en la promoción de ascenso a la Asobal en 2014 y también el pasado curso, en esta misma eliminatoria y en el mismo día, en la Copa. En ambas ocasiones, el Benidorm salió vencedor.
El equipo benidormense, que ha tenido una semana para preparar este partido, afronta el encuentro con la máxima motivación tras las dos derrotas consecutivas en la Liga y alertado del potencial de su rival, que eliminó al Zamora, recién descendido de la Asobal, con suficiencia.
Además, uno de los principales objetivos de la temporada para el club es disputar por primera vez en su historia la fase final de la Copa del Rey, para lo que es necesario superar dos eliminatorias.
Equisoain, tal y como ha hecho en anteriores ocasiones, repartirá minutos entre todos los jugadores de la plantilla, con mayor protagonismo para aquellos que menos han participado hasta el momento en la Liga.
"No es un equipo fácil porque es un rival que triplica sus prestaciones en su pista", afirma el entrenador navarro, quien garantiza que si el Balonmano Benidorm "juega con intensidad y fuerte debe pasar".
"Ellos pelean mucho y no dan un balón por pedido. Esta eliminatoria es un problema mental porque si salimos con mentalidad relajada tenemos posibilidades de no pasar", explicó Equisoain, quien podrá contar con toda su plantilla para este compromiso.
