Un grupo de autobuses, a su llegada al Castillo de Santa Bárbara.ALICANTE. El bipartito de Alicante (PP y Cs) se aviene a estudiar la petición planteada por los establecimientos hoteleros de Alicante, agrupados en la Asociación Provincial de Hoteles de Alicante (APHA), y debatirá cambios en la gestión del Castillo de Santa Bárbara para potenciar su uso turístico como sede de presentaciones, eventos y reuniones profesionales. Los concejales de Cultura y Turismo, Antonio Manresa y Mari Carmen Sánchez (ambos de Cs) se mostraron abiertos a estudiar todas las opciones, incluida la posibilidad de que se produzca un traspaso de competencias sobre el baluarte o de que se concierte un modelo de gestión compartida, por ejemplo.
Los dos regidores coincidieron en que el Castillo juega un papel esencial como uno de los principales valores turísticos de la ciudad, con una media de 450.000 visitas anuales. De ahí que coincidiesen en que la oportunidad de ampliar su utilización con fines turísticos en la línea reivindicada por APHA, siempre que las actividades que se desarrollen resulten compatibles con la protección del patrimonio.
En esta línea, incidieron en que "entre la explotación y la sobreexplotación existe una separación muy difusa" y recordaron que todas las decisiones que se han adoptado hasta ahora respecto a restricciones de acceso, como la prohibición de estacionamiento de vehículos particulares, o como la suspensión del funcionamiento del ascensor, "han sido para preservar la protección del patrimonio o para cumplir con los protocolos sanitarios frente al covid".
De igual modo, apuntaron que, desde el inicio del actual mandato, se ha actuado para "evitar comportamientos incívicos" que pudiesen poner en peligro la integridad del baluarte y se ha velado para que no se trate de dar un uso privativo al patrimonio de la ciudad. Así, las mismas fuentes apuntaron que, desde que entró en vigor la actual ordenanza fiscal que regula el alquiler de las salas del Castillo, en 2013, se ha ingresado poco más de 11.000 euros bajo ese concepto, cuando en esa normativa se establece un precio de 1.190 euros por el uso mínimo (cinco horas) de la sala Felipe II y de 1.500 por el uso del patio de armas.
Como informó este diario, el planteamiento que APHA ha trasladado al equipo de Gobierno es imprimir cambios en el modelo de gestión del Castillo, de modo que se facilite la organización de actividades relacionadas con el sector turístico, sin la complejidad burocrática que se requiere en la actualidad para solicitar su cesión.
Lo cierto es que la petición formulada por los hoteles de Alicante para potenciar el castillo coincide con las reivindicaciones formuladas por el conjunto de los operadores turísticos de la ciudad, con motivo de la I Jornada de Turoperadores Turísticos organizada por el Observatorio de Cruceros de la Fundación Proport, celebrada en febrero.
