ALICANTE. La red metropolitana de tranvía de Alicante, conocida como sistema Tram, avanza hacia la ejecución del último tramo pendiente para completar el proyecto, más de una década después de que se trazase su diseño. Se trata de la conexión del ramal subterráneo entre la actual estación de Luceros y la terminal de ferrocarril de Renfe.
En realidad, parte de ese recorrido ya esta disponible. Existe un primer tramo de 250 metros de túnel construido bajo la avenida de la Estación, que se pretende finalizar ahora con un segundo tramo de 400-500 metros más, bajo la avenida de Salamanca. Su construcción permitirá enlazar con una nueva estación o parada término, ya en terrenos del ente Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), con el fin de favorecer la intermodalidad entre el tranvía y el ferrocarril.
Fuentes de la Conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad confirmaron a Alicante Plaza que la empresa pública Ferrocarrils de la Generalitat (FGV) prevé elevar al pleno del Consell a mediados de noviembre (o, en todo caso, antes de fin de año) la propuesta de licitación para la redacción del proyecto constructivo. Es decir, el diseño técnico necesario para que, después, pueda contratarse la obra en sí misma.
Lo cierto es que, hasta el momento, no hay plazos concretos para el inicio de los trabajos. Tampoco sobre el tiempo en el que se prolongarían las obras una vez iniciadas, ya que se trata de factores que quedarán definidas en el proyecto constructivo. Así, tan sólo existe una primera estimación técnica de cuál puede ser su presupuesto: unos 35 millones (entre 30 y 40, en función de cómo se perfile el proyecto), en los términos en los que se viene barajando desde el pasado mes de marzo (antesala de las elecciones generales y autonómicas). El anuncio de la ejecución de este tramo lo formuló el propio presidente del Consell, Ximo Puig, quien llegó a augurar incluso que la obra estaría en funcionamiento en cuatro años.
No obstante, a falta de mayor definición técnica, sí se tiene constancia de las implicaciones que conllevará, una vez esté ejecutada. La primera es de pura lógica: la construcción del ramal y de la nueva estación facilitará una mayor rapidez y comodidad en los transbordos entre tren y tranvía, sin necesidad de que los usuarios deban cubrir un trayecto de diez minutos entre ambos medios de transporte.
Y la segunda afectará a toda la red Tram. La futura conexión de Luceros con la estación de Adif permitirá ampliar las frecuencias de paso de las líneas actuales ((L1, L2, L3 y L4 con destinos a Benidorm, Sant Vicent del Raspeig, El Campello y Plaza La Coruña, respectivamente), ya que la nueva estación a construir ampliaría las vías disponibles y, por tanto, las posibilidades de maniobra para dotar a todo el sistema de más capacidad de circulaciones a la hora. Ahora, la estación de Luceros (punto de cabecera de la red) dispone únicamente de dos vías, lo que limita esa operativa.