"Era un encuentro vital para irnos de vacaciones en segunda posición", decía el preparador madrileño que era el primero en reconocer que en el arranque el rival había estado mejor: "A base de saques de esquinas el Atlético Levante nos ha metido en nuestra área, pero a partir del minuto 25 hemos cogido el mando del partido y tanto en el final de la primera parte como durante toda la segunda hemos dominado y tenido ocasiones para no llegar al final con un resultado tan ajustado", decía Cubillo que consideraba "muy merecida" la victoria del Hércules e "importante para continuar arriba".
Problemas con el gol
Preguntado por cuáles habían sido sus sensaciones durante el duelo, viendo que sus jugadores no lograban transformar ninguna de las claras ocasiones de que estaban disponiendo, el técnico blanquiazul respondía que es algo que "tienen asumido": "Tenemos que sufrir, lo estamos viviendo; sabemos lo que nos está costando y lo que trabajamos para mejorar esto", recalcaba Cubillo, que apuntaba "a una cuestión de mala suerte" para justificar que les cueste tanto marcar (el de este domingo no solo fue el primer triunfo a domicilio del Hércules en este curso, es que hasta la fecha no había visto puerta fuera de casa).
"El día que nos entre un gol en la primera parte (algo que todavía no han conseguido) o que logremos el segundo para ir más a gusto, veremos un Hércules bien distinto. La diferencia viene muchas veces por eso", pronosticaba el preparador, que si bien consideraba que en la situación en la que está el equipo es indiferente quien marque porque "la aportación de todos es importante", sí que reconocía que le "gusta más" que marquen los de arriba, los bandas, pues es una forma por la que ven recompensado todo el trabajo que hacen en busca de precisamente el gol".
Lesionados
En cuanto a Javi Acuña e Ismael Falcón, los dos lesionados con los que acabó el Hércules la cita de Bunyol, Cubillo celebraba tanto que lo del delantero paraguayo (que tuvo que retirarse en el minuto 18 por un golpe en el gemelo derecho) todo apuntaba a que se iba a quedar en "un golpe" como que los suyos habían sabido rehacerse de "un contratiempo que trastocaba todo el plan del partido". Ahora bien, a la hora de referirse a los problemas musculares con los que el meta gaditano había cerrado el choque le cambiaba el gesto: "Cuidado que a lo mejor... Habrá que valorarlo, esperemos volver todos sanos", decía.
