Compromís se divide ante la elección de Alfred Costa como director general de À Punt

VALÈNCIA. Parecía todo medianamente tranquilo en el Botànic de cara a la comisión de la radiotelevisión valenciana que se celebra este miércoles en Les Corts después de semanas de negociaciones. Parecía, pero no. El PSPV, Compromís y Unides Podem habían llegado a un acuerdo para sacar adelante todos los nombres de los órganos directivos de À Punt a menos de un mes de la disolución del Parlamento autonómico con unos más que ajustados tiempos. En el seno de la coalición, sin embargo, no parecen todos muy contentos con el posicionamiento. 

Dos diputados de Compromís, Josep Nadal y Mónica Álvaro, han comunicado que no acudirán a la cita porque no les agrada el perfil de Alfred Costa como director general de la radiotelevisión. El cual ocupa actualmente este cargo y está previsto revalidarlo en él. 

Ambos parlamentarios han trabajado en la comisión durante las dos últimas legislaturas. De hecho, Mónica Álvaro es la portavoz de la coalición en ella. Preguntada al respecto, argumenta que "la actual dirección general de À Punt acumula más sombras que luces". "En principio, se ha conseguido el segundo canal de radio, que ha sido cosa nuestra durante estos años. Pero seguimos sin tener contrato programa ni informes de pluralidad política en los medios. Tampoco solicitan el valenciano en las bolsas de trabajo y la red pública de radios y televisiones comarcales es una entelequia", señala. En su opinión, la dirección "está muy lejos de cumplir mínimamente con lo que la ley pauta". 

Por su parte, Josep Nadal anunció ayer martes en su Twitter que no asistirá este miércoles "por cuestiones de conciencia": "Respeto la postura del partido, pero no estoy de acuerdo con ratificar un proyecto contrario al modelo de radiotelevisión que hemos defendido desde el grupo parlamentario y que dio lugar a la ley y después a À Punt. Creo que últimamente no se ha respetado la pluralidad informativa ni se ha intentado crear un medio de país. Seguramente iré errado en muchas cosas, pero tengo claro que mi modelo no es el de Notícies de Canal 9 ni el de la vuelta de Bárbara Rey. Ya sé que hacer pública mi postura no vale de nada, pero tengo la esperanza de que algún día Compromís se tome seriamente el tema de los medios y dejemos de estar perpetuamente entre el PSOE y la pared". 

Desde la coalición aseguran que la posición del partido no se va a mover y votarán a favor de Alfred Costa. Debido a la ausencia de sus dos diputados en la comisión, desde el grupo comentan que acudirán dos parlamentarios en sustitución, los cuales ejercerán como portavoces. Previsiblemente serán la síndica, Papi Robles, y Vicent Marzà. 

De la comisión de la radiotelevisió, además de Costa, tiene que salir la elección del presidente (Miquel Francés salvo sorpresa) y de los nuevos miembros del Consell Rector de la Corporació Valenciana de Mitjans de Comunicació (CVMC). Dos a propuesta del Consell de l'Audiovisual (Lola Bañón y Javier Marzal) y dos de los partidos a los que les tocaba el recambio. Unides Podem quiere mantener a María Lozano, mientras que Ciudadanos propone a Luis Gil-Orozco, actual jefe de Gabinete de la líder de los naranjas en la Comunitat, Mamen Peris. 

El PP entra a negociar

La luz verde a todos estos nombramientos se enmarca en un acuerdo más amplio entre el Botànic para el conjunto de los órganos consultivos, que en este momento funcionan de manera interina. Se trata de la Sindicatura de Comptes, el Consell Jurídic Consultiu, el Consell de Transparencia, el Consell Valencià de Cultura y el Consell d'Universitats. 

Como ha informado Valencia Plaza, el PSPV, Compromís y Unides Podem están cerca de sellar un pacto debido a la proximidad de las elecciones con un reparto de nombres que ya se encuentra sobre la mesa. Se trata de cargos que pueden designar ante la incertidumbre de quién gobernará tras los comicios y que permanecerán en sus puestos los próximos 4 ó 6 años –dependiendo del órgano–. 

Tras este entendimiento, ahora falta lograr los apoyos necesarios. La elección de perfiles para la mayoría de estas instituciones puede salir adelante con 60 diputados. Es decir, el Botànic (52) más 8. Y aquí es donde entra en juego la oposición.

La estrategia de los partidos de la izquierda ha sido la de dar un ultimátum al PP: o entran en las negociaciones o sacan los nombramientos adelante con Ciudadanos (que cuenta con 13 diputados). La norma que suele imperar en este tipo de designaciones es que se realicen por orden de representatividad en Les Corts. Motivo por el que, normalmente, los socialistas siempre han metido a los populares en la ecuación y los han considerado los interlocutores prioritarios de la oposición. 

Pero las prisas por sacarlo ahora todo adelante antes de la disolución del Parlamento autonómico en menos de un mes ha llevado a que el Botànic haya lanzado este órdago. Las conversaciones con el PP se han retomado en las últimas horas, según admiten desde los grupos. Por ahora, eso sí, sin nombres concretos y a la espera de hasta dónde quieren consensuar. 

En el pacto, los populares tendrían un representante en la Sindicatura de Comptes, otro en el Consell Jurídic –el órgano más conflictivo porque además querían acodar un segundo nombre de consenso entre los partidos– y otro en el Consell de Transparencia.