ELCHE (AP/EFE). Compromís ha denunciado este jueves el "uso privativo, privilegiado e injustificado" que asegura ha hecho el directivo de Ribera Salud, Alberto de Rosa, del Hospital Universitario del Vinalopó, centro público gestionado por su empresa. "Estamos ante un uso fraudulento de recursos públicos durante la atención prestada al presidente de Ribera Salud, grupo que mantiene la gestión privatizada del centro a pesar de ser de titularidad pública", ha expuesto el diputado Carles Esteve.
La coalición, mediante informaciones de los trabajadores y trabajadoras del centro, ha tenido conocimiento según indican de unos hechos ocurridos alrededor del pasado 29 de junio y que demostrarían un trato privilegiado para el directivo de Ribera Salud, a quien la empresa cerró parte de una planta hospitalaria para la atención de De Rosa. Añaden que el directivo es, "además", hermano del diputado del Partido Popular en el Congreso y expresidente de la Audiencia de València y vicepresidente del Consejo General del Poder Judicial, Fernando de Rosa.
“Según las informaciones, el trato fue diferente al de cualquier otro paciente en una situación parecida. Estuvo ingresado en una habitación individual, manteniendo sin ocupar las habitaciones adyacentes. Se dedicó personal de enfermería específico para su atención en exclusiva y personal de seguridad, también dedicado”, ha continuado Esteve.
El diputado valencianista ha registrado una batería de 20 preguntas referidas al caso: “Se modificaron operaciones o ingresos en planta para atender a De Rosa? Era conocedora la Consellería de Sanidad de estas excepcionales circunstancias? Y la Presidencia de la Generalitat Valenciana?”, ha señalado. “Exigimos al presidente Carlos Mazón que investigue los hechos con celeridad y que, caso de confirmarse, supongan la finalización inmediata de la gestión de cualquier departamento, hospital, centro de salud o servicio sanitario público del que Ribera Salud mantenga una gestión privada”.
El parlamentario también ha destacado el hecho de que Ribera Salud dispone de diez hospitales privados y a la hora de someterse a una intervención, "el presidente de esta empresa elige el único hospital público que todavía gestionan, para recibir allí un trato privilegiado".
Esteve ha recordado que el caso se suma a la anomalía vivida en el mismo hospital cuando en 2020 Ribera Salud desplazó decenas de enfermeras de los hospitales públicos que gestionaba para hacer test de COVID en la población de Torrejón (Madrid) y cumplir una operación de marketing sanitario del Partido Popular de Madrid.
Por su parte, el conseller de Sanidad, Marciano Gómez, ha defendido este jueves en Les Corts que el Gobierno de Carlos Mazón se aleja de la "ideología" y el "sesgo" en una apuesta por la "eficacia y la eficiencia" y ha reprochado a los grupos de la oposición que estén "descolocados".
Gómez ha hecho estas manifestaciones al ser preguntado por la denuncia de Esteve y Compromís. Gómez ha contestado al diputado de Compromís que el Gobierno de Mazón, frente al del Botànic, se "aleja de las ideologías" y ha retomado "lo que tenía que retomar", como la gestión del hospital de Dénia.
"El señor De Rosa es un empresario como los demás", ha señalado, y ha afirmado que la ideología del Consell es clara y el objetivo es el "control y evaluación" y "no se quedará ni un euro público valenciano en ninguna de las empresas que en estos momentos están en las concesiones".
Por su parte, los grupos municipales de Compromís Elx y Crevillent se han pronunciado después de conocer la denuncia de trabajadores del Hospital del Vinalopó y que ha hecho pública su compañero de partido.
"Es un hecho muy grave que demuestra hasta qué punto afecta el interés público a la gestión privatizada de este centro sanitario", ha afirmado Esther Díez y ha explicado que "de ser así sería un abuso de poder por parte de Alberto de Rosa que afecta directamente a los pacientes del Hospital Vinalopó que no pudieron ser atendidos por este uso supuestamente fraudulento de de Rosa”.
“Hay que recordar que la suya es la empresa que más dinero ha hecho a expensas de las privatizaciones de salud pública en la Comunitat Valenciana. Por tanto, el alcalde de Elche, Pablo Ruz, debe explicar si estos son los motivos por los que está en contra de la reversión del hospital. Es incomprensible e injustificable que un alcalde defienda los intereses de una empresa privada por encima de los derechos de sus vecinos y vecinas. Noticias como las de hoy ayudan a entender mejor la postura de los dirigentes del PP”, ha manifestado Díez.
La portavoz del grupo municipal se ha preguntado "por qué, sino, ¿cómo es posible que un alcalde prefiera que un hospital público esté en manos de intereses empresariales que en manos de profesionales del sistema público?".
Por su parte, la portavoz del grupo municipal de Crevillent, Virgina Moriel, ha asegurado que “es algo totalmente inadmisible, es muy grave y pone en evidencia una vez más el clientelismo de ese Partido Popular. Es un ejemplo más de por qué este hospital y todos los centros de salud de este departamento deben volver a la gestión pública al cien por cien de forma urgente”.
“Los negocios, caprichos de una empresa, no pueden estar por encima de la salud de las personas y vecinos y vecinas de Crevillent, Elche, el Hondón de las Nieves, Frailes o Aspe, porque estas personas no valen menos que el resto de gente de la Comunidad Valenciana ni valen menos que Alberto de Rosa. Pedimos tener las mismas garantías y que nuestras vidas no sean un número para garantizar beneficios a final de año. Queremos saber qué le debe Ribera Salud al Partido Popular para hacer esto y le pedimos al gobierno de la Generalitat Valenciana que no sea cómplice de esta derrota. Está en sus manos la salud de muchas personas y la reversión a la gestión pública de este departamento de Salud es una cuestión totalmente urgente”, ha concluido Moriel.