Los ediles de Compromís, Natxo Bellido y Rafa Mas, a las puertas de la biblioteca.ALICANTE. El grupo municipal de Compromís en el Ayuntamiento de Alicante ha denunciado este martes el cierre de la Biblioteca Juan XXIII, que "junto al cierre de la Biblioteca del Mercado Central y el próximo de la Biblioteca del barrio de Los Ángeles, dejan bajo mínimos el servicio bibliotecario municipal", según han apuntado portavoces oficiales, a través de un comunicado.
En esta línea, el edil de la coalición valencianista, Rafa Mas, ha acusado directamente al concejal de Cultura, Antonio Manresa (Cs), de "dejadez de funciones por permitir el cierre permanente de la biblioteca municipal de Juan XXIII por la marcha de un funcionario". Para Mas "jamás un concejal ha hecho tan poco por la cultura alicantina y el acceso de la ciudadanía a la misma. Desde hace dos años venimos denunciando la precariedad de la red de bibliotecas municipales. Antes de la pandemia contábamos con once bibliotecas en la ciudad, ahora son nueve y próximamente ocho si se cierra la de Los Ángeles".
En esta línea, Mas ha añadido que "todo esto se une a la falta de compra de libros nuevos, hasta el punto que las bibliotecas se nutren solo de donaciones particulares, la falta de personal o la falta de iniciativas como el Bibliobus para recorrer las pedanías de Alicante". A juicio de Compromís, esta situación "incrementa la desidia desde la área de cultura al no contar la ciudad ni con salas de estudios municipales ni abrir los fines de semana las bibliotecas, siendo solo la apertura de lunes a viernes y en horario muy reducido".
Así, para Compromís, "el remate a esta precariedad", según Mas, "es la organización de la 51 edición de la Feria del Libro, a la cual "ningún concejal de Compromís acudirá por la nefasta gestión y el maltrato a las escritoras y escritores de nuestra ciudad". Mas ha concluido señalando que "la mejor aportación que puede hacer el alcalde a la cultura de la ciudad de Alicante es cesar en sus funciones al concejal de Cultura Antonio Manresa".
Por su parte, el edil de Cultura ha asegurado, al término de su comparecencia habitual para dar cuenta de los acuerdos aprobados en Junta de Gobierno, que desconocía las condiciones concretas por las que se había producido el cierre de la biblioteca, así como el plazo en el que podría prolongarse.
No obstante, sí ha señalado que "la falta de personal no es una situación nueva ni en Cultura, ni en el resto de departamentos municipales" y ha recalcado que "esa falta de personal es especialmente sensible por lo que respecta a las necesidades de conserjes". Así, ha apuntado que "no resulta fácil cubrir esas ausencias en la medida en que, por normativa, no se puede acordar la transferencia de personal desde unos puestos a otros", ha señalado. En todo caso, ha apuntado que "trataremos de buscar una solución".
