MADRID (EP). El sindicato CIG ha manifestado este martes su rechazo a la opa hostil que el BBVA quiere lanzar para hacerse con el 100% del Sabadell, al considerar que ahonda en la "concentración" del sector bancario, y supone pérdida de empleo y precarización laboral.
Así lo ha trasladado la CIG, tras celebrar una reunión de las secciones sindicales de ambas entidades bancarias, en la que se ha abordado la situación creada tras el fracasado intento de fusión y el anuncio de la opa por parte del BBVA.
En la reunión, celebrada en Santiago de Compostela, han participado los secretarios de la secciones sindicales, Miguel Fernández y Miguel Lis, y la responsable del sector financiero en la CIG, Rosa Conde.
El sindicato nacionalista mantiene su rechazo a una posible nueva reestructuración del sector, porque supondrá la "destrucción de miles de puestos de trabajo y un nuevo cierre de oficinas bancarias". Esto, han advertido, aumentará "un escalón más" las dificultades de los clientes en el acceso a los servicios bancarios.
Además, las secciones sindicales han señalado que ya se está produciendo en ambas entidades un "aumento de la presión sobre el personal" y una "sobrecarga de trabajo". Así, en el BBVA se han elevado los objetivos para el segundo cuatrimestre del año, justo en la época prevacacional, con la intención de que "el trabajo de cuatro meses se haga en tres".
Con esta medida, denuncia la CIG, el banco pretende "presumir" de sus resultados para convencer a la Junta de Accionistas de su buena gestión y de la conveniencia de la opa para aumentar aún más los "obscenos beneficios".
Asimismo, ha apuntado el sindicato, la dirección del banco ha dado instrucciones a los trabajadores para que contacten con los accionistas con el fin de que deleguen su voto en el Consejo de Administración, de cara a la junta extraordinaria de ampliación de capital prevista para el 5 de julio. La CIG ha anunciado que acudirá a esa junta con la delegación de voto de los trabajadores para mostrar su posición contraria a la opa.
En el caso del Sabadell, ha añadido el sindicato, la situación es semejante, con una "desmesurada presión" para la venta de productos financieros y consecución de objetivos, unas presiones que "ahondan en la precariedad laboral" de la plantilla.
A la situación de cada entidad se suma la "paralización" en la mesa negociadora del convenio colectivo, que según la CIG "obedece a oscuros intereses para no establecer una subida slaarial que pueda influir en las futuras negociaciones de un ERE si la opa sale adelante".